"Solía emborracharse para luego abandonar" la bebida, contó Mitch.
Aunque aún no se sabe oficialmente la causa de su muerte, "sospecha" que pudieron ser los ataques.
El padre de la malograda cantante británica Amy Winehouse reveló que su hija, a la que hallaron muerta en su departamento de Londres el pasado 23 de julio, sufría convulsiones a causa de su larga y conocida batalla con el alcohol.
En una entrevista que publica el tabloide británico The Sun, Mitch Winehouse explicó que la artista, que tenía 27 años cuando falleció, "había sufrido convulsiones, porque solía emborracharse para luego abandonar" la bebida.
"Tuvo una (crisis) en una habitación de un hotel en Nueva York cuando se encontraba hablando por Skype con un amigo. Se desplomó frente a él y tuve que llamar a los empleados de seguridad del hotel" para que fueran corriendo, recordó.
Mitch Winehouse indicó que aunque la causa del fallecimiento de Amy no se sabrá hasta conocerse los resultados de la investigación judicial abierta para esclarecer las circunstancias de la muerte, "sospecha" que pudo haber sido ocasionada precisamente por esos ataques que sufría periódicamente la autora del álbum "Back to black".
De manera paralela a la autopsia, tras la muerte de Winehouse, que consiguió con sus dos únicos discos ganar cinco Grammys y alcanzar la fama mundial por su inconfundible voz y su voluminoso peinado, se puso en marcha una investigación judicial.
Los resultados de esa pesquisas, habituales en el Reino Unido cuando no se puede determinar a primera vista los motivos del fallecimiento, no se harán públicos hasta octubre.
En la entrevista con el tabloide, Mitch Winehouse también exculpa al ex marido de la artista, Blake Fielder-Civil, de su prematuro final: "A él le culpo de muchísimas cosas. El la inició en el camino hacia las drogas, pero (su muerte) se trató de un accidente horrible. Fue su responsabilidad (refiriéndose a Amy)".
