Tropas internacionales iniciaron una operación para terminar con la red terrorista.
Decomisaron armas y explosivos que se encontraban en la zona.
Más de 20 supuestos insurgentes, entre quienes había árabes, chechenos y paquistaníes, murieron en el transcurso de un bombardeo en el sureste de Afganistán, anunció la Fuerza Internacional de Asistencia a la Seguridad (ISAF).
Las tropas afganas e internacionales iniciaron el pasado miércoles una operación para acabar con varios campamentos que la red terrorista Haqqani mantenía en el distrito de Dzadran, de la provincia suroriental de Paktya, afirmó la ISAF.
En vista de la operación en marcha, "docenas" de insurgentes se atrincheraron en distintas posiciones de esa zona montañosa para enfrentarse a las tropas, según la organización, "con ametralladoras, lanzagranadas y armas automáticas".
"Un equipo aéreo acabó con el enemigo. Más de 20 insurgentes murieron la primera noche", añadió.
Las tropas conjuntas decomisaron y destruyeron armas y explosivos de los insurgentes durante la operación en la zona, usada supuestamente por la red Haqqani como lanzadera para cometer ataques en Kabul y en el paso que une las provincias de Khost y Gardez.
