El secretario de Estado adjunto para América Latina, Arturo Valenzuela, dijo que es "absolutamente necesario" que Argentina devuelva "de inmediato" el equipo confiscado por las autoridades argentinas en un avión de la Fuerza Aérea estadounidense.
"No hubo ninguna intención de violar leyes argentinas. Todo lo contrario, lo que se buscaba era la disposición de tener un trabajo conjunto, respetuoso, constructivo (...) es absolutamente necesario que se devuelvan de inmediato esos materiales", enfatizó Valenzuela en entrevista con el canal por cable CNN en Español.
"No tiene sentido que se hayan incautado materiales de esa forma, especialmente cuando, como insisto, lo que se estaba realizando era un proyecto de trabajo conjunto, autorizado por ambos países, para encarar un tema tan importante como es el rescate de rehenes", señaló el diplomático.
El jueves pasado, las autoridades argentinas confiscaron cerca de mil pies cúbicos del cargamento del avión que llegó al aeropuerto bonaerense de Ezeiza con "material calificado como de guerra", destinado a un curso conjunto sobre seguridad para la Policía.
El incidente ha suscitado tensiones entre los Gobiernos de Washington y Buenos Aires, pero Valenzuela criticó que Argentina haya reaccionado con "acusaciones desmesuradas", tomando en cuenta que ambos países tienen buena cooperación en asuntos de defensa y seguridad ciudadana.
Para Valenzuela, se trata del pobre manejo de un asunto que pudo resolverse "de forma respetuosa" pero que "desgraciadamente, ha tomado dimensiones superiores".
Versión argentina
Según la versión argentina, la inspección de la Aduana y la Policía de Seguridad Aeroportuaria (PSA) detectó diferencias entre el material declarado y la carga, compuesta por armas, drogas, entre ellas, varias dosis de morfina, y equipos con información calificada como "secreta".
Pero Valenzuela explicó que "los medicamentos los usan las personas cuando están haciendo este tipo de ejercicios porque pueden haber accidentes (...) es obvio que uno lleva mucho material de preparación, pero no es nada fuera de orden".
Los equipos en cuestión, continuó, "fueron conversados con las autoridades argentinas de antemano, y si hubo alguna discrepancia en alguna de estas cosas, se debió haber conversado y haber tratado de resolver el problema sin pasar a estas acusaciones que son desmesuradas".