Los altos índices de delincuencia llevaron a los habitantes de Aodi a aislarse.
La estructura cuenta con vigilantes estratégicamente ubicados.
Una pequeña localidad montañosa en el este de China construyó una muralla para aislarse del exterior, principalmente de los ladrones que han causado una elevada tasa de criminalidad en los últimos meses, informó el portal de noticias chino NetEase.
La página web ofrece imágenes de la construcción en la ciudad de Aodi (provincia de Zhejiang), que imita a la famosa Gran Muralla y tiene 500 metros de perímetro y nueve de altura. La muralla cuenta incluso con las clásicas almenas en su partes superiores y vigilantes apostados en lugares estratégicos.
La ciudad tiene la ventaja de que está rodeada por montañas en tres de sus cuatro puntos cardinales, por lo que solo ha sido necesario amurallar la parte no montañosa, contó NetEase.
La puerta de la muralla, de gran tamaño, cierra de 22:00 a 06:00 horas y posee un sistema de identificación por tarjetas con banda magnética para que sólo los vecinos accedan a la fortificada ciudad.
Aodi se ha convertido en una próspera localidad a raíz de la construcción de una autopista, lo que según las autoridades ha atraído a muchos inmigrantes a la zona y también ha aumentado los robos.
Muchas antiguas ciudades chinas estaban amuralladas en el pasado, entre ellas Pekín, aunque estos sistemas defensivos perdieron efectividad y dejaron de usarse hace siglos en el país asiático.
