El ex presidente cubano salió a desmentir los rumores sobre su estado de salud.
Repudió las "mentiras y estupideces" difundidas por "la propaganda imperialista".
El ex presidente de Cuba, Fidel Castro, a través de un artículo con fotografías recientes suyas publicadas en el sitio web Cubadebate, salió este lunes a desmentir los rumores que circulaban sobre el agravamiento de su estado de salud.
"¡Aves de mal agüero! No recuerdo siquiera qué es un dolor de cabeza. Como constancia de cuán mentirosos son, les obsequio las fotos que acompañan este artículo", ironizó el líder de la revolución cubana, de 86 años.
En el artículo, que se titula "Fidel Castro está agonizando" (en alusión a recientes publicaciones internacionales que respaldaban dicha versión), el ex presidente critica el "alboroto" del "gallinero de la propaganda imperialista" y las "mentiras" e "insólitas estupideces" que se han dicho sobre él.
Junto al texto, la web oficial Cubadebate divulgó nueve fotografías recientes de Castro, donde se le ve con un ejemplar del diario Granma del pasado viernes 19 de octubre, al aire libre, de pie aunque apoyado en un bastón metálico, con sombrero de paja y vestido con camisa de cuadros y pantalón deportivo.
Se le ve también observando varios árboles que parecen moreras y moringas, las cuales fueron el tema de una de sus últimas "Reflexiones" en el mes de junio, cuando propuso su cultivo masivo como alternativa para "la alimentación y el empleo sano".
"Estamos aquí con la frente en alto"
Si bien dejó de publicar estos textos, el ex mandatario aclaró que sigue escribiendo y estudiando.
"Me gusta escribir y escribo; me gusta estudiar y estudio. Hay muchas tareas en el área de los conocimientos. Nunca las ciencias, por ejemplo, avanzaron a tan asombrosa velocidad", explicó.
Además, Castro aprovechó para recordar la Crisis de los Misiles, de la que fue uno de sus protagonistas junto al norteamericano John F. Kennedy y el soviético Nikita Kruschev, justo cuando se cumple medio siglo del episodio que puso al mundo al borde de una guerra nuclear.
Cuba en aquella crisis fue "éticamente intachable", aseguró Castro, y si aceptó la ayuda soviética en armas, petróleo, alimentos y otros recursos fue para defender a su país de una invasión yanki.
"Nunca pediremos excusa a nadie por lo que hicimos. Lo cierto es que ha transcurrido medio siglo, y aún estamos aquí con la frente en alto", subrayó.
