Raúl Castro admitió cierto retraso en plan para desinflar planillas estatales
El presidente cubano indicó que las reformas económicas tardarán cinco años en ponerse en marcha.
Sostuvo que no se pueden cometer errores para no amenazar la revolución.
El presidente cubano indicó que las reformas económicas tardarán cinco años en ponerse en marcha.
Sostuvo que no se pueden cometer errores para no amenazar la revolución.
Las reformas económicas de Cuba tardarán al menos cinco años en ponerse en marcha, según el presidente Raúl Castro, quien admite un retraso en el proceso de ajuste laboral para desinflar las plantillas estatales, una de las principales medidas del plan de ajustes.
C
astro hizo estas consideraciones en una reunión ampliada del Consejo de Ministros celebrada el pasado viernes pero cuyo contenido fue divulgado este martes por la televisión estatal.
En esta reunión el presidente cubano dijo que el plan de ajustes económicos no debe hacerse con apresuramiento ni improvisación porque la "mayor amenaza" a la revolución reside en los errores que se puedan cometer.
"La actualización de nuestro modelo no es tarea de un día, ni siquiera de un año y por su complejidad demandará no menos de un quinquenio desplegar su implementación", indicó el reporte televisivo citando a Raúl Castro.
Sobre el proceso para desinflar las abultadas plantillas estatales, señaló que esta medida "no constituye un fin en sí mismo sino una medida encaminada a recuperar la eficiencia y la disciplina en los colectivos de trabajadores bajo el principio de la idoneidad demostrada y el mejor derecho".
También resaltó que se trata de una medida que no puede enmarcarse en "plazos inflexibles", reconoció que el inicio de este proceso se ha retrasado e insistió en que el Estado cubano "no dejará a nadie desamparado".
El gobierno de Raúl Castro impulsa en la isla un plan de ajustes económicos para intentar superar la grave crisis que Cuba arrastra desde hace décadas.
Entre las medidas más importantes destacan la reforma laboral en el sector estatal, donde para este año se habían anunciado 500.000 despidos así como la ampliación del trabajo por cuenta propia, que en la práctica supone cierta apertura a la iniciativa privada.