Una de las tareas del nuevo secretario de Defensa de Estados Unidos será evaluar la propuesta de aumentar la dotación de tropas en Irak, las cuales ascienden a 500 mil soldados.
El ex director de la Agencia Central de Inteligencia, Robert Gates, asumió este lunes la jefatura del Pentágono como sucesor del ex secretario de Defensa Donald Rumsfeld, mientras el presidente George W. Bush evalúa una nueva estrategia para Irak.
La designación de Gates, de 63 años de edad, fue confirmada rápidamente por el Senado.
El presidente Bush aceptó la renuncia de Rumsfeld un día después de las elecciones legislativas de noviembre en las cuales el Partido Republicano perdió, por primera vez desde 1994, el control de ambas cámaras del Congreso.
Gates tomó juramento de su cargo en una ceremonia privada en la Casa Blanca, y luego en una ceremonia pública en el Pentágono a la cual concurrió Bush y oficiales militares de alto rango.
Además de las guerras en Irak y Afganistán, el nuevo jefe del Pentágono deberá atender otros problemas que quedaron pendientes durante la gestión de Rumsfeld.
Uno de ellos es la propuesta del Ejército para que el Congreso autorice un aumento del contingente autorizado de tropas, que actualmente es de 500 mil soldados. (EFE)
