Ante miles de visitantes, especialmente españoles, el pontífice reiteró su condena a los actos terroristas y pidió por las familias de las víctimas en el país ibérico.
El Papa Juan Pablo II se declaró afectado e impresionado ante el "horrendo e injustificable" atentado cometido en Madrid que mató a 200 personas y dejó a casi 1.500 heridas.
El Pontífice, ante aproximadamente un millar de visitantes que asistieron a pesar del temor existente en Italia por un posible atentado, expresó su solidaridad con el dolor de los familiares de las víctimas e invocó a la Virgen para que "proteja a la querida nación española".
Muchas de las personas presentes eran españoles, quienes utilizaron banderas de su país con crespón negro para manifestar su luto y tristeza ante el atentado.
"El horrendo crimen ha sacudido a la opinión pública mundial. Ante tanta barbarie se queda profundamente desconcertado y nos preguntamos como el hombre puede llegar a concebir hechos tan execrables", afirmó el Papa, quien cumplirá 84 años en mayo.
Juan Pablo II, quien el mismo día del atentado expresó su dolor y condena, volvió a reiterarlos este domingo.
"Reitero la absoluta condena ante un hecho injustificable y expreso una vez más mi participación en el dolor de los familiares de las víctimas y mi cercanía en las plegarias por los heridos y sus familiares", manifestó el Pontífice.
El pasado día 11, al conocer sobre la matanza en Madrid, el Papa condenó los "execrable atentados" y animó a los españoles a proseguir en el camino de una convivencia pacífica y serena.
El Pontífice, en un telegrama enviado al cardenal de Madrid, Antonio María Rouco Varela, reiteró su más "firme y absoluta reprobación de tales injustificables actos que ofenden a Dios, violan el fundamental derecho a la vida y socavan la pacífica convivencia". (EFE)
