El presidente del gobierno español, el socialista Pedro Sánchez, exigió al presidente del Ejecutivo regional catalán, el independentista Quim Torra, que condene los actos violentos que se han producido en los últimos días en esa comunidad autónoma española y le recordó que tiene el deber "moral y político" de hacerlo.
En una rueda de prensa tras reunirse con los líderes de los principales partidos españoles, Sánchez aseguró que ningún gobernante - en referencia a Torra- "puede ocultar su fracaso con cortinas de humo y fuego".
El líder del PSOE indicó el miércoles que por ahora tendrán una "respuesta al desafío" proporcional por lo que, por ahora, no aplicarán el artículo 155 y señaló que está convencido "que volverá a restablecer la normalidad en Cataluña".
Las manifestaciones de protesta por la sentencia contra los líderes independentistas catalanes, condenados a penas de entre 9 y 13 años de cárcel, se reprodujeron este miércoles después de una madrugada en la que radicales provocaron decenas de incendios callejeros por toda Barcelona.
Esos incidentes se saldaron con 125 heridos, 18 de ellos llevados a hospitales, aunque ninguno de gravedad.
Partidarios del independentismo catalán iniciaro lo que denominan "marchas por la libertad" en varios puntos de la región. Miles de personas marchan en diversas columnas por carreteras con el objetivo de converger en Barcelona el próximo viernes, cuando sindicatos independentistas han convocado una huelga general.
El presidente regional catalán, el independentista Quim Torra, se sumó a una de esas marchas. En unas breves declaraciones, evitó condenar los actos de violencia de las dos últimas noches y señaló que tanto él como su gobierno "están al lado de la gente".
Además, hoy se produjo una concentración de estudiantes independentistas en la Universidad Autónoma de Barcelona, donde varias personas ocuparon el rectorado de la institución.
