Logró un acuerdo de evacuación de grupos armados opositores en Guta Oriental, lo que en la práctica equivale a una rendición.
El triunfo es "un golpe decisivo al proyecto terrorista dirigido contra Siria", destacan las fuerzas leales a Bachar Al Asad.
Las fuerzas gubernamentales sirias se hicieron este sábado con el control total del penúltimo reducto rebelde en Guta Oriental, una zona en las afueras de la capital, tras completar un acuerdo de evacuación de grupos armados opositores.
Las tropas leales al presidente Bachar al Asad recuperaron hoy las ciudades de Arbín, Zamalka, Ein Tarma y el barrio damasceno de Yobar, que colinda con estas poblaciones de Guta Oriental, después de que saliera de la zona el último convoy de autobuses con combatientes y civiles, según anunciaron fuentes oficiales sirias.
El portavoz de la Comandancia General del Ejército sirio, Ali Maihub, afirmó en un discurso televisado que el triunfo en Guta es "un golpe decisivo al proyecto terrorista dirigido contra Siria".
Asimismo, destacó que la importancia de esa victoria reside en que permitirá "recuperar la seguridad y la estabilidad de forma completa" en Damasco y sus afueras, así como en las principales carreteras que comunican la capital con el sur del país.
En virtud del acuerdo, que en la práctica equivale a una rendición, los evacuados se dirigieron hacia la provincia de Idleb, en el norte del país.
La mayoría de esa provincia está bajo el control del Organismo de Liberación del Levante, nombre de la alianza armada de la ex filial siria de Al Qaeda, y otros grupos islamistas, y es la zona adonde han sido evacuados los rebeldes de otras regiones recuperadas en los últimos meses por el Gobierno.
Más de 150 mil evuados de Guta
La última tanda de evacuados de las cuatro localidades recuperadas hoy por las autoridades sirias consta de unas 3.000 personas, incluyendo civiles y combatientes, según cálculos del Observatorio Sirio de Derechos Humanos.
Esta ONG ha documentado que, por el momento, 46.400 civiles y combatientes han sido evacuados de Guta Oriental hacia Idleb en virtud de los acuerdos.
A estos, se suman otros 108.000 civiles que han dejado Guta Oriental por su propio pie a través de los corredores habilitados por las fuerzas sirias, con destino a zonas bajo control gubernamental.
Ejército amenaza con ataque a última reductor opositor
Tras las evacuaciones de esta jornada, la última ciudad de Guta Oriental que sigue en manos rebeldes es Duma, la mayor de la región y que está en poder del grupo islamista Ejército del Islam.
Esta facción está negociando desde hace varios días con Rusia, valedor de las autoridades de Damasco, una posible entrega de las armas. Las conversaciones están en una fase avanzada, según el Observatorio y medios oficiales sirios.
La pasada jornada Rusia llegó a anunciar un acuerdo, pero este fue desmentido inmediatamente por el Ejército del Islam, cuyo portavoz negó que el grupo acepte abandonar Guta Oriental.
Desde el viernes el ejército sirio ha reforzado sus posiciones en las afueras de Duma y el portavoz de la Comandancia vertió hoy amenazas sobre un posible ataque contra el Ejército del Islam.
Este es el único grupo que todavía no ha alcanzado un acuerdo de evacuación, que en los otros casos implicaron la entrega del territorio y las armas pesadas y medianas.
El resto de grupos islamistas presentes en la región aceptaron entregar las armas después de haber perdido terreno contra las tropas de Al Asad en una ofensiva que se prolongó cerca de tres semanas.
Más de 1.600 civiles muertos en ofensiva del Ejército
La ofensiva terrestre de las tropas gubernamentales sirias y sus aliados se inició el 25 de febrero y estuvo precedida una semana antes por una intensificación de los bombardeos y de los disparos de la artillería, lo que causó un gran número de bajas civiles.
Según el Observatorio, desde el comienzo de la campaña de bombardeos, el 18 de febrero, han muerto 1.644 civiles, entre ellos 344 menores de edad y 213 mujeres.
El agravamiento de la ofensiva en la zona llevó al Consejo de Seguridad de la ONU a realizar una reunión urgente y a aprobar una resolución que exigía una tregua en todo el país, pero esta fue ignorada por las partes.
