Defensa reiteró que mantendrá la independencia en temas como la disuasión nuclear.
Durante décadas París ha aportado fondos y tropas, sin estar en el alto mando del grupo.
El gobierno francés estima que necesitará un plazo de tres años para su integración plena a la Organización del Tratado del Atlántico Norte (OTAN), decisión que anunció esta semana el presidente Nicolas Sarkozy.
El ministro de Defensa, Hervé Morin, declaró que para que Francia se convierta en "la cabeza y las piernas" de la alianza tendrá que transcurrir ese plazo de tiempo, después de que Sarkozy adelantó que París se integrará en el mando militar del grupo.
En declaraciones a la radio Europe 1, Morin afirmó que "ganaremos con ello, porque hoy somos las piernas de la OTAN, pero no estamos en su cabeza y lo que queremos ser es tanto la cabeza como las piernas".
Morin recordó que Francia "es el cuarto contribuyente financiero y en soldados a la alianza, hemos participado en todas las operaciones de la OTAN desde 1995 y las hemos dirigido en Afganistán o en Kosovo".
Sarzkozy anunció el pasado 11 de marzo que el retorno de Francia al mando militar de la OTAN es un paso necesario que no mermará la independencia de París en cuestiones clave como la disuasión nuclear o el envío de tropas, temas que habían mantenido por décadas a los galos fuera del alto mando de la alianza.
La disuasión nuclear francesa seguirá siendo "independiente", al igual que la "libertad" de decisión sobre el envío de militares a ciertas operaciones de la Alianza, aseguró el presidente en un discurso en el que explicó las razones de la decisión.
