Corea del Norte sostuvo que ambos países serán culpables de romper el cese al fuego.
Las maniobras surcoreanas suponen el uso de 20.000 soldados.
Corea del Norte volvió a denunciar las maniobras anuales conjuntas entre Corea del Sur y Estados Unidos un día antes de su prevista conclusión.
Se trata de la primera ocasión en que Pyongyang emitió un memorando para criticar esas maniobras militares que concluirán el jueves tras movilizar a 18.000 soldados estadounidenses y 20.000 surcoreanos para prepararse ante una eventual invasión por parte de Corea del Norte.
Corea del Norte consideró que Seúl y Washington "no serán libres de la responsabilidad de haber roto la paz y la desnuclearización en la península coreana" y alegó que las maniobras no son de carácter defensivo, sino preludio de una invasión a su territorio.
Pyongyang resaltó que los dos aliados llevaron a cabo esos ejercicios "cuando más que nunca" la comunidad internacional exige la paz en la península coreana.
Además, Corea del Norte instó a Washington a "adoptar medidas prácticas para poner fin a la situación de guerra y las relaciones hostiles entre Corea del Norte y EE.UU.".
Coincidiendo con el comienzo de esas maniobras, el pasado 8 de marzo, Pyongyang ya había amenazado con detener su proceso de desnuclearización y desvincularse del acuerdo de alto el fuego que puso fin a la guerra de Corea.
