El premio Nobel destacó que el nacionalista moderara su actitud durante la campaña.
Reiteró que por ningún motivo votará por Keiko Fujimori.
El escritor peruano y premio Nobel de Literatura, Mario Vargas Llosa, mostró su "esperanza" de que la "nueva actitud" del candidato nacionalista a la presidencia de Perú, Ollanta Humala, sea "cierta" y que se confirme en "acuerdos concretos" que le permitan votar por él.
En una rueda de prensa en Montevideo, donde el novelista acudió para participar en la apertura del curso académico de la Universidad Católica, Vargas Llosa se refirió a la segunda vuelta electoral en su país, en la que Humala se medirá a la legisladora Keiko Fujimori, hija del ex presidente Alberto Fujimori (1990-2000), encarcelado en su país por violaciones a los derechos humanos cometidas durante su gobierno.
"Mi esperanza es que eso que dice (Humala) sea cierto (...) y que esa nueva actitud que dice haber adoptado sea una realidad que confirme con acuerdos concretos que nos permita a quienes no queremos que de ninguna manera se desplome un sistema que trae buenos resultados a Perú (...) votar por él", afirmó el escritor.
El candidato nacionalista "despierta muchos recelos" por su pasada proximidad al presidente venezolano, Hugo Chávez, y por su defensa de políticas de intervencionismo estatal que Perú ya vivió durante la dictadura de Juan Velasco Alvarado (1968-1975) y "cuyas consecuencias padecimos todos", analizó Vargas Llosa.
Vargas Llosa valoró cambio de actitud
El novelista, conocido por sus posturas liberales, reconoció como algo positivo que Humala moderara su actitud durante la campaña y asegurara que no nacionalizará la economía, que respetará la economía de mercado y la independencia de los medios, si bien apuntó que en su programa de Gobierno "las viejas ideas están siempre allí".
En cualquier caso, Vargas Llosa ratificó que "de ninguna manera" votará por Fujimori, porque hacerlo significaría: "la resurrección de una de las dictaduras mas crueles y más corrompidas que hemos tenido en la historia del Perú".
"Fujimori nunca hizo un distanciamiento con la dictadura de su padre, todo lo contrario, la ha celebrado, y clarísimamente lo que significaría para el Perú su victoria sería que se abrieran las cárceles, y que los ladrones y asesinos, condenados por tribunales civiles en juicios impecables, pasarían de los calabozos a gobernar de nuevo", dijo.
