El prelado, que sonara fuerte como uno de los posibles sucesores de Juan Pablo II, expresó que Benedicto XVI fue sacado de contexto en las alusiones al profeta Mahoma que molestaron a los musulmanes.
El cardenal hondureño y obispo de Tegucigalpa, Oscar Rodríguez Madariaga, afirmó que el impasse que se vivió con el Islam, debido a unas frases de Benedicto XVI sobre Mahoma, demostraron que el "mundo está muy lejos del respeto mutuo y de la tolerancia".
En entrevista con El Diario de Cooperativa, Rodríguez, que fuera uno de los nombres que sonaban como posibles sucesores de Juan Pablo II, expresó, además, que las palabras del Papa fueron sacadas de contexto.
"Creo que el problema más bien ha sido causado por sacar fuera de contexto lo que era una clase académica, usted sabe que cualquier profesional de la comunicación, para hacer un titular, puede hacer esto", señaló el cardenal.
El obispo de Tegucigalpa agregó que "no lo considero un error, el problema ha sido una manipulación, no tal vez muy meditada, una manipulación de algo que fuera del contexto de una clase y de una discusión académica puede ser utilizado de cualquier manera".
Como conclusión de ello, añadió, se debe sacar una lección positiva, y "esto nos está diciendo que el mundo está muy lejos del respeto mutuo, está muy lejos de la tolerancia y de aceptar el pensamiento de los demás, no como enemistad sino como posibilidad de diálogo".
El cardenal Rodríguez Madariaga sostuvo que "para mí, una guerra nunca puede ser santa" y agregó que "si uno va y lee el Corán, se da cuenta que las palabras de Mahoma referentes a la guerra santa es la guerra contra lo negativo que uno tiene contra sí mismo".
Celibato
Respecto de otra polémica que ha sacudido a la Iglesia Católica, tras la excomunión del arzobispo emérito (jubilado) de Lusaka (Zambia), Emmanuel Milingo, el arzobispo hondureño sostuvo que nada hace indicar que el celibato tenga que ser revisado dentro de los cánones de la institución.
Si bien dijo no estar al tanto de caso de Milingo, quien contrajo matrimonio y además ordenó como sacerdotes a cuatro hombres casados que no renunciaron al vínculo, Rodríguez consideró justa la excomunión debido a que el obispo de Lusaka rompió los códigos que rigen la religión que profesa.
Sobre el tema de fondo, indicó que la tesis de que al permitir el matrimonio de los sacerdotes se podría dar una mayor cercanía con los feligreses "es un enfoque equivocado porque el celibato no es una obligación, se asume libremente. Y si alguien llegara a eso por obligación, no podría seguirlo".
"Ya estamos casados, nuestra vida y nuestra entrega es auténticamente un matrimonio con el señor Jesús y con la Iglesia", añadió.
El prelado sostuvo que la práctica del celibato lleva demasiados siglos implementada y que, si fuese una práctica alejada de los preceptos cristianos ya se habría modificado por acción la "divinidad".
"El celibato no es ausencia de amor, es sobreabundancia de amor, y entonces, si usted entiende la entrega del amor sólo desde el punto de vista sexual-genital, es un enfoque que verdaderamente empobrece", expresó.
"Los que quieren que se quite el celibato no saben lo que es, porque no es un empeño humano, sino una gracia que viene de Dios", remató el cardenal Rodríguez Madariaga. (Cooperativa.cl)
