Portavoz de la Santa Sede señaló que Juan Pablo II, que sufrió un fuerte estado febril producto de una infección urinaria, "está muy grave" pero "consciente, lúcido y sereno".
El Juan Pablo II "está muy grave" tras sufrir un colapso cardiocirculatorio, según afirmó en las primeras horas de este jueves el portavoz de la Santa Sede, Joaquín Navarro Valls.
A través de un comunicado, Navarro aseguró que "esta mañana las condiciones de salud del Santo Padre son muy graves", aunque hizo hincapié en que está "consciente, lúcido y sereno" y su situación está continuamente controlada por un equipo médico.
Juan Pablo II permanece en sus aposentos del Vaticano ya que, por su propia decisión, quiso ser trasladado al policlínico Gemelli de Roma.
El vocero confirmó además que el Sumo Pontífice recibió la unción de los enfermos, tal como habían adelantado fuentes vaticanas.
En su relato de los hechos, Navarro apuntó que en la tarde del 31 de marzo le fue diagnosticada a Juan Pablo II una infección en las vías urinarias, tras lo cual tuvo lugar "un choque séptico con colapso cardiocirculatorio", que fue atendido inmediatamente por el equipo médico que estaba de guardia en su departamento privado en el Palacio Apostólico y se activaron todas las medidas "terapéuticas y de asistencia cardiorrespiratoria necesarias".
A últimas horas de la tarde del jueves los médicos consiguieron una "estabilización temporal del cuadro clínico que, de todas formas, en las horas posteriores, evolucionó de manera negativa".
A las 19:17 hora local del jueves el Papa recibió la unción de los enfermos, según la nota de Navarro, quien precisó que a las 6:00 horas de este viernes, ha "concelebrado" la misa.
El secretario de Estado vaticano, cardenal Angelo Sodano y otros colaboradores cercanos siguen la evolución de las condiciones clínicas de Juan Pablo II, quien es atendido por su médico, Renato Buzzonetti, así como dos especialistas en reanimación, un cardiólogo, un otorrinolaringólogo y dos enfermeras. (EFE)
