El abogado Rodrigo Henríquez aseguró que gran parte de los logros alcanzados en la investigación del caso Riggs por parte del juez Sergio Muñoz se deben a aportes hechos en sus declaraciones por su defendido, el ex albacea de Pinochet Oscar Aitken.
Henríquez explicó a Radio Cooperativa que Aitken, encausado como cómplice de delito tributario, "recibió del Banco Riggs un fideicomiso o trust por seis millones de dólares y que lo que se le pidió fue que se abrieran cuentas y se incorporaran a distintas sociedades que él representara".
A esto se suma al conocimiento de su defendido de una "inversión fallida" de un millón de dólares, que incautó el Consejo de Defensa del Estado a principios de agosto, según explicó.
Al respecto, destacó que se está dando "algo de confusión", ya que esa suma no es nueva: "Siempre se supo por parte del ministro", ya que su representado se lo dio a conocer.
"Yo creo que el ministro Muñoz le debe a Oscar Aitken mucho de lo que ha logrado y también, hay que reconocerlo, la familia Pinochet fue la que le alzó el secreto profesional de todo abogado para que fuera a declarar ante el ministro Muñoz y le contara absolutamente de todo lo que se había hecho por parte de él. Y a partir de eso, se llega a los seis millones de dólares que se ordenan traer a Chile", recalcó.
El abogado reiteró, además, su posición respecto a que Aitken "no sabía que Pinochet no declaraba los impuestos respecto de los ingresos que recibía desde el extranjero, por lo tanto no hay dolo en su actuar y no puede ser cómplice, no puede tener participación en los hechos que está investigando el ministro Muñoz".
Además, "están las declaraciones del general Pinochet, reconociendo que era el único actor directo de toda esta situación", dijo en referencia a la carta pública del ex dictador, y que en Chile no existe la figura de complicidad en las declaraciones maliciosas o incompletas de impuestos.
Sobre la misiva de Pinochet, redactada tras la detención la semana pasada de su hijo Marco Antonio y su esposa, Lucía Hiriart, afirmó que "valida la defensa", más allá de la situación mental de Pinochet, ya que -a su juicio- el hecho de que esté inhabilitado de enfrentar la justicia no quiere decir que esté "loco o demente".
"En este momento, (Aitken) no tiene ninguna relación con Augusto Pinochet" pese a que lo considera un cliente estimado, al que le guarda respeto, expresó Henríquez y aclaró que la salida a la luz pública del caso Riggs le ha impidió recibir sus honorarios. (Cooperativa.cl)