El alcalde de la comuna de Santiago, Pablo Zalaquett, atribuyó a la burocracia propia del Estado la demora de casi seis meses en el pago de los bonos de la ley de incentivo al retiro, que deben recibir los trabajadores jubilados de su municipio.

"Lo lamento mucho (...), a uno le encantaría que el aparato estatal fuera más rápido. Creo que más que ser parte de un gobierno específico tiene que ver con la forma como funciona el Estado", aseveró el edil.
La Ley 20.135, aprobada durante el Gobierno de Michelle Bachelet en 2006, surgió como una iniciativa que busca renovar las plantas de funcionarios ofreciendo incentivos económicos a quienes cumplen la edad para jubilar, pero que dado sus ingresos tienden a postergar dicho proceso.
En esa situación se encuentran casi 50 funcionarios de la municipalidad de Santiago que se acogieron al beneficio a fines de 2010, como es el caso de Juan Araneda, ex auxiliar por 27 años.
"Ahora tengo a mi señora enferma, necesito esa plata porque lo más probable es que la van a operar del corazón. Me he contactado con varios colegas y tienen miedo de reclamar porque dicen que el alcalde se puede enojar y no les puede pagar", sostuvo Araneda.
"Un dolor muy grande"
Por su parte, la presidenta de la Asociación de Funcionarios de la Municipalidad de Santiago, María Angélica Puelma, indicó que "el procedimiento no considera desde el punto de vista humano el tiempo que tienen que esperar estas personas sin recibir ninguna pensión, como tienen que vivir meses sin tener ningún ingreso".
"La ley de incentivo al retiro es una gran ley, como sector público la recibimos muy bien, pero estos aspectos burocráticos de cómo pagarle a la gente han hecho un dolor muy grande que tenemos con el Estado", añadió Puelma.
El jefe comunal de Santiago informó que los dineros ya ingresaron a las arcas del municipio y se está cursando un decreto de pago por lo que debería empezar a entregarse los próximos días.