El superintendente subrogante de Servicios Sanitarios, Jorge Rivas, anticipó que de mantenerse la gravedad de la sequía que afecta a gran parte del país, el próximo verano debería haber racionamiento de agua potable en Santiago.
Rivas expuso a El Mercurio que las autoridades han hecho "un enorme esfuerzo en años previos para que abramos la llave y salga agua, pero tendremos que hacer bastantes esfuerzos adicionales porque así como están las cosas, el próximo verano podría haber racionamiento", ante lo cual "les estamos pidiendo a las sanitarias que asuman que esto no va a mejorar".
Afirmando que ningún experto vaticinó la gravedad de la sequía, que mantiene a los caudales de los ríos en sus niveles "más bajos históricamente en la Región Metropolitana, en Valparaíso y O'Higgins", el superintendente estima que "este verano en la Región Metropolitana pasaremos con lo justo".
"Enero ha sido muy duro respecto de la turbiedad por las altas temperaturas en la cordillera", subrayó, apuntando que "si eso hubiese ocurrido un año atrás, en Santiago se habría cortado el agua, pero gracias a los megaestanques de Pirque que Aguas Andinas está terminando de construir, eso no se produjo".
Obras para enfrentar la situación
"Nos estamos poniendo en un escenario igual de extremo que el actual", aseguró, porque "si tenemos un año igual de malo que 2019, tendríamos que sacar agua subterránea": por eso, agregó, es que Aguas Andinas iniciará la construcción en marzo de una batería de pozos en La Pintana, "15 pozos de 250 a 300 metros, de 1.500 litros por segundo, que es un porcentaje relevante, 7 a 8 por ciento de la demanda que en Santiago es del orden de 20 mil litros por segundo", y que representan inversiones por 35 millones de dpolares.
En ese sentido, Rivas sostuvo que "siempre hay un plan de suministro alternativo en casos de cortes de agua", porque "esto no es de un día para otro, se sabe con semanas de anticipación": en el caso de Santiago, resaltó, "tenemos el embalse El Yeso, que es el gran reservorio de agua y que suple cuando hay algún déficit en el río", pese a que -precisó- "está del orden del 30 por ciento de su capacidad, que es bajo respecto de un año normal".
También "está la planta de tratamiento de agua potable Padre Hurtado, que está en La Reina, que se ampliará en 1.000 litros por segundo y son casi 40 millones de dólares", la cual "se necesita construir cuanto antes para que esté disponible en un año y medio más. Hay otras cosas que van sumando, como otros sondajes en Santiago".
Sobre otras regiones, advirtió que "la situación en el Gran Valparaíso también está justa. El problema será en el verano de 2020-2021", y para enfrentarlo "Esval construirá un gran acueducto entre el embalse Los Aromos y una planta de tratamiento en Concón, que permitirá garantizar por muchos años el suministro en el Gran Valparaíso. Estamos con los plazos justos".
