Tres carabineros fueron formalizados en el Octavo Juzgado de Garantía de Santiago por obstrucción a la investigación, falsificación de instrumento público y lesiones graves tras protagonizar un confuso incidente durante un control de identidad en Providencia en septiembre del año pasado.
Los funcionarios policiales -el cabo segundo Gustavo Díaz, el cabo Nicolás San Martín y el carabinero Diego Acuña- fueron acusados por inculpar a un grupo de jóvenes de un delito y luego ocultar un error de procedimiento.
De acuerdo a los antecedentes, los policías estaban vestidos de civil y acompañados de un inspector municipal a bordo de un vehículo.
Mientras realizaban patrullajes en el Parque Bustamante se percataron de un vehículo que tenía sus vidrios polarizados, tras lo cual hubo una persecución y en calle Ramón Carnicer se desató la confusión.
Fiscalía acusó entrega de antecedentes falsos
La Fiscalía acusa que los carabineros se bajaron con armas de fuego apuntando al vehículo – donde se encontraban 3 jovenes – y sin portar chaleco antibalas, ni placas.
Al momento que el vehículo intenta retroceder, el cabo segundo Díaz disparó en 8 ocasiones hiriendo al conductor en su rodilla izquierda y posteriormente, en el centro de Santiago, los detiene.
Por último, el Ministerio Público acusó a los carabineros de montar un procedimiento en el parte policial, como lo expresó el persecutor de la Fiscalía Local de Ñuñoa y Providencia, Álvaro Pérez.
"A partir de ahí se informa a la Fiscalía que los hechos previos a esta persecución están determinados por la participación de los imputados en un delito de robo con intimidación. La investigación ha arrojado que ese delito de robo con intimidación no están, no existió y por lo tanto son antecedentes falsos que fueron vertidos desde los actos iniciales desde cuando se comunicó a la Fiscalía y que llevó a la Fiscalía incluso a adoptar decisiones de detención", dijo el fiscal.
"El Tribunal da por acreditado que los tres funcionarios de Carabineros obstruyeron la investigación y, por lo tanto, ese es un delito penado, así como también uno de ellos se logró acreditar la obstrucción en la investigación, su participación en un delito de lesiones graves, tras efectuar aproximadamente ocho disparos", añadió el persecutor.
La versión de la defensa
La versión de la defensa indica que los carabineros se percataron de un robo con intimidación a una pareja, previo a los hechos. También que se identificaron, ocupando sus chalecos antibalas y mostrando sus placas y que se utilizó el arma de servicio –según ellos– cuando el vehículo retrocedió e intentó atropellar a un funcionario.
"No quedamos conformes con la decisión del magistrado, los antecedentes emitidos por el ente persecutor no fueron de tal entidad para poder establecer unas medidas cautelares más intensas a mis representados, a pesar que se le atribuye a uno de ellos haber cometido el delito de lesiones graves", dijo el abogado defensor, Alejandro Díaz.
Los policías fueron formalizados por obstrucción a la investigación, falsificación de instrumento público y lesiones graves.
El cabo segundo Gustavo Díaz quedó en prisión preventiva, trasladado al Centro Penitenciario de Pudahuel y con una fianza de 3 millones de pesos para quedar en libertad, mientras que el cabo Nicolás San Martín quedó con arresto domiciliario total y el carabinero Diego Acuña estará con arraigo nacional y firma semanal.
El teniente coronel Mauricio Romero, de la 19ª Comisaría de Providencia, sostuvo que se desarrolla un sumario interno y que los funcionarios no han sido desvinculados de la institución a la espera de esa investigación.
"Inmediatamente acontecidos los hechos el mando ordenó instruir la investigación, pero estamos a la espera que se pronuncie el Ministerio Público para establecer los hechos administrativos por parte de Carabineros. El sumario sigue abierto y estamos en espera que resuelva nuestro alto mando. Hasta el momento no han sido desvinculados de la institución", sostuvo.
El tribunal en tanto decretó un plazo de 90 días para llevar adelante la investigación.
