Cinco exfuncionarios del Ejército -cuatro exoficiales y un exsuboficial- fueron puestos en prisión preventiva y en arresto domiciliario total por el Juzgado de Garantía de Arica tras ser formalizados por el Ministerio Público por la muerte del soldado conscripto Franco Vargas, ocurrida durante una marcha de instrucción militar en Putre, Región de Arica y Parinacota.
Los cargos presentados por la Fiscalía incluyeron apremios ilegítimos con resultado de cuasidelito de homicidio -por la muerte del joven de 19 años-; lesiones gravísimas -por otros dos conscriptos que sufrieron amputaciones por infecciones-, y lesiones graves.
El tribunal determinó la prisión preventiva del teniente coronel Claudio Guajardo Pinochet, el teniente Bjorn Wohllk Araya, el subteniente Bastián Troncoso Jaque y el enfermero Manuel Zambrano González, al considerarlos garantes de las vidas de los soldados y cuyo actuar -según el juez- significó un peligro para la seguridad de la sociedad.
En tanto, la Justicia consideró la colaboración del capitán Michael Fritz Gervasoni, cuyo relato permitió acreditar los apremios y vincularlos también a otros hechos, razón por la que se decretó su arresto domiciliario total.
La jueza Macarena Calas planteó que "queda claro que las personas que participaron en estos hechos tenían un nivel de garante, más allá de su jerarquía directa respecto de los imputados. Tampoco es efectivo lo alegado por la defensa del señor Wohllk, cuando nos dice que él ya sufrió una sanción porque lo echaron del Ejército, eso es una sanción administrativa, esto es penal, y en materia penal hay sanciones, por lo cual es rechazado ese argumento".
"Son todos hombres de Ejército, con condiciones físicas y con conocimientos para poder escapar. Se entiende que la libertad de los imputados es peligrosa por el tipo de acto, la forma en que actuaron y respecto de jóvenes vulnerables que se encontraban a su total disposición", precisó, añadiendo que "la pena que arriesgan es efectiva".
La audiencia de formalización se realizó en dos jornadas, una de ocho horas el martes y otra este miércoles, de manera mixta, con imputados, abogados defensores y querellantes, participando de forma presencial y remota.
En ella, se presentaron fotografías del cuartel militar Pacollo, donde inició la marcha, y videos de la reconstitución de escena realizada en el altiplano, que incluyó el lugar donde se desplomó Vargas y su posterior traslado al centro de salud familiar de Putre donde, de acuerdo a testigos, habría llegado con signos vitales.
El fiscal Mario Carrera apuntó que "la muerte activa una respuesta de situaciones que venían ocurriendo en días anteriores". Además, enfatizó en la diferente entre "aporreos" y apremios ilegitimos.
Por su parte, el abogado de la madre de Vargas, Sebastián Andrade, señaló que hubo "incumplimiento de reglamentos, abuso de cargos".
Se decretó un plazo de investigación de 120 días.