Ana María Aarón señaló que su edad es crítica para la capacidad de establecer vínculos.
Abogó por revisar el sistema para evitar apegos interrumpidos.
La sicóloga de la Universidad Católica Ana María Aarón señaló que separar a la pequeña Matilde de sus padres guardadores, que se niegan a devolverla, puede causarle problemas emocionales que pueden ser comparados con graves daños físicos.
"Matilde habría tenido separaciones: su madre que la abandonó, los cuidadores que la cuidaron hasta que tuvo dos meses y medio, pero esta es una edad crítica", sostuvo, y añadió que a futuro puede crearle "un gran sufrimiento e interferencias para sostener nuevos vínculos".
"Es como que a esta niñita le quebráramos las dos piernas: la podemos rehabilitar y le podemos ofrecer una buena cirugía, un lugar en la Teletón de preferencia, pero va a quedar fracturada. Esto es el equivalente desde el punto de vista emocional", dijo.
Aarón, quien redactó un informe que aconseja que la menor se quede con sus guardadores, indicó a Una Nueva Mañana que en el caso, el foco está puesto más en los adultos que en los niños, cuando son ellos los que sufren el cambio, y que la comunidad debería disminuir a lo menos posible el alto riesgo que sufre.
Para Aarón, el sistema de padres transitorios es estupendo porque esos períodos "son más sanos que tener un niño en una institución" pero que debe ser revisado ya que hay que ver "lo que significa para el niño tener tantos apegos interrumpidos".
