Junto a Cordillera, el penal es consecuencia de "un acuerdo constitucional que surgió el año 95", explicó el ministro.
Indicó que se debe poner énfasis en reducir el hacinamiento en el resto de los recintos del país.
Felipe Bulnes, ministro de Justicia, se refirió a las condiciones en la cual se encuentran los violadores a los DD.HH. en los penales de Punta Peuco y Cordillera, recalcando que esto es producto de un acuerdo político logrado en 1995.
"Respecto de Punta Pe
uco y Cordillera, ese es un acuerdo constitucional que surgió el año 95 y me llama la atención que nos sorprendamos, ese fue el acuerdo político al que se llegó por los actores políticos de la época y es también parte de las tradiciones carcelarias con las que tenemos que convivir", indicó a El Diario de Cooperativa.
Bulnes recalcó que "desde siempre se supo que Punta Peuco y Cordillera eran recintos diferenciados, pero como ministro de Justicia voy hacer cumplir la ley conforme a la institucionalidad que tenemos: no le otorgaré beneficios especiales a los militares, más allá de los que la institucionalidad prevea, pero tampoco los humillaré".
Por contrapartida, el secretario de Estado indicó que se debe poner el foco en reducir el hacinamiento carcelario en los demás penales del país.
"Yo me preocuparé de mejorar las condiciones carcelarias del resto de la población penal, porque ahí tenemos una situación de crisis que se arrastra desde hace demasiadas décadas y que hay que tomárselo en serio", apuntó.
Según Bulnes, "me alegro cuando se habla de cárceles se hable de hacinamiento, porque es una realidad que estoy empeñado en ponerla arriba de la mesa y espero que esta misma preocupación que existe sobre el tema carcelario se traduzca en apoyo en los proyectos de ley destinados al uso racional de las cárceles".
