El vocero de las víctimas de la tragedia de calle Serrano, en Valparaíso, Marcos Ayala, afirmó que se sienten abandonados por las autoridades ya que, a tres meses de ocurrido el lamentable hecho, no han recibido la ayuda necesaria, afirmó.
"Estoy viviendo de allegado en casa de una amiga, con el dolor, con la pena, con la tristeza de haber perdido a mis seres queridos y que las autoridades, la verdad, nos sentimos abandonados por parte de ellas, eso es lo que sentimos nosotros", criticó el vocero.
Ayala, quien perdió en la tragedia a su madre, Margot Pozo, y a su hermano, Aldo Ayala, acusó que la ayuda con que se comprometió la ministra de Vivienda, Patricia Poblete, se ha visto entrampada por cierta "burocracia" del Servicio de Vivienda y Urbanismo (Serviu) del puerto.
"La ayuda ha sido demasiado lenta, nosotros llevamos tres meses, la ministra Poblete prometió que en dos meses la gente ya podría estar viviendo en sus casas, y hay gente que todavía no puede encontrar casa por tema de subsidios y cierta burocracia de parte del Serviu de Valparaíso", enfatizó el hombre.
Ayala, si bien agradeció la ayuda del Gobierno para que opten a una nueva vivienda, recordó que ellos, antes de la explosión del 3 de febrero, "lo tenía todo", por lo que con los siete millones que les ofreció el Estado no les alcanza.
"La mayoría de las personas que sufrieron la tragedia les ha costado una enormidad encontrar casa en Valparaíso o sus alrededores. Nosotros entendemos que es una ayuda del Gobierno, y se la agradecemos, pero deberían ser ayudas más concretas pensando en la clase media (...) Ellos nos entregan un subsidio de siete millones de pesos donde en Valparaíso no podemos encontrar ninguna casa de ese valor", explicó el vocero.
Finalmente, Marcos Ayala aseguró que un estudio hecho por un organismo donde se establece que Chilquinta y GasValpo fueron los responsables de la tragedia, y agregó que la ciudad es "una bomba" donde puede ocurrir otro hecho lamentable. (Cooperativa.cl)