Alemania destinará un millón de euros a las víctimas de Colonia Dignidad

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Autor: Cooperativa.cl

El monto no podrá emplearse hasta que no se presente un claro plan de ayuda que precise de qué manera se repartirá el dinero.

Esta partida se suma a los 800.000 euros ya aprobados para otros cometidos.

Alemania destinará un millón de euros a las víctimas de Colonia Dignidad
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El Parlamento alemán destinará a partir del año que viene un millón de euros en concepto de ayudas directas y concretas a las víctimas de Colonia Dignidad, centro de operaciones en Chile de una secta dirigida por el ex nazi Paul Schäfer.

El socialdemócrata Matthias Bartke, presidente de la comisión parlamentaria de Trabajo y Asuntos Sociales, explicó en el semanario Der Spiegel que con la partida presupuestaria, aprobada anoche, se pretende facilitar a las víctimas de Colonia Dignidad "las urgentemente necesarias prestaciones de apoyo".

Esta partida se suma a los 800.000 euros ya aprobados para otros cometidos, como la construcción de un centro de encuentro y memoria.

Comisión determinará cómo repartir el monto

El millón de euros no podrá emplearse hasta que no se presente un claro plan de ayuda que precise de qué manera se repartirá el dinero, para lo cual ya el pasado 10 de octubre se constituyó una comisión conjunta, integrada por diputados de todos los grupos parlamentarios y representantes del gobierno.

La comisión tiene previsto celebrar en Berlín este mes y el que viene dos sesiones con expertos y representantes de asociaciones de víctimas y el objetivo es tener listo el plan de ayuda hasta el verano que viene.

"Fue una lucha dura. Estoy satisfecha de que este objetivo tan importante finalmente se haya podido alcanzar", dijo por su parte el portavoz del grupo parlamentario conservador para derechos humanos, Michael Brand.

Para Bartke, "los horribles crímenes en Colonia Dignidad sólo pudieron ocurrir, porque la embajada alemana en Chile no intervino en su día a pesar de las numerosas llamadas de socorro".

"Esta pasividad fue uno de los capítulos más oscuros de la diplomacia alemana de la posguerra", agregó.

En julio pasado el Gobierno alemán había presentado ante el Bundestag un plan para revisar los crímenes cometidos en Colonia Dignidad y para apoyar a las víctimas, pero en el que se descartaba de manera expresa ayudas económicas individuales.

El plan fue recibido con indignación por muchos diputados y Brand lo calificó de "escándalo" y "documento burocrático frío y cínico".

Reacciones desde Chile

Gabriel Rodríguez, vocero de la Agrupación por la Verdad y la Memoria de Colonia Dignidad, manifestó que "es una buena noticia para los numerosos grupos de víctimas de Colonia Dignidad. Yo espero que esto permita una reparación a muchos ex colonos que viven fuera de la Colonia o en la Colonia en condiciones miserables, pero no así a muchos jerarcas que gozaron y gozan de muchos beneficios también del enclave de Schäfer".

"Espero que también llegue reparación para los niños abusados, que llevan 20 años esperando una reparación y sin duda que permita también seguir avanzando en toda la verdad y en toda la justicia respecto de los numerosos crímenes que se cometieron en el enclave Colonia Dignidad", sostuvo.

Por su parte, el abogado Roberto Celedón comentó que "el aporte con lo decidido en el Parlamento alemán y aprobado en esa instancia indica que en la visita de los diputados, parlamentarios alemanes, en definitiva fueron escuchadas las víctimas y los parlamentarios lograron el cambio de posición del gobierno alemán en cuanto a la extensión de los actos de reparación e indemnización a las víctimas, que son chilenos y también ciudadanos alemanes".

Entre 1961 y 2005, en Colonia Dignidad unas 300 personas que siguieron a Schäfer de Alemania a Chile fueron sometidos a trabajos forzados, castigos y manipulación mental, a lo que se suman los abusos sexuales cometidos contra menores.

Colonia Dignidad, situada a unos 300 kilómetros de Santiago, sirvió además de centro de torturas de la Dirección de Inteligencia Nacional (DINA), la policía secreta de Augusto Pinochet, y se estima que más de 100 opositores al régimen fueron asesinados en el recinto y constan todavía como desaparecidos.

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