Felipe Sandoval recalcó que se trata de un proceso natural que ha afectado a la zona.
Se manifestó abierto a un estudio realizado por especialistas sobre el tema.
Sandoval manifestó su preocupación por los trabajadores de Quellón.
El presidente de SalmonChile, Felipe Sandoval, reiteró en Cooperativa que el vertimiento de salmones muertos al mar no tuvo relación con la marea roja que afecta al sur del país.
En conversación con El Diario de Cooperativa, Sandoval sostuvo que "científicos de diverso orden y personas de distinta naturaleza han dicho que esto fue bien hecho, con sus autorizaciones respectivas basadas en convenios internacionales y depositados en un lugar donde no va a tener efecto en la costa chilena".
"La marea roja es algo muy distinto al vertimiento de salmones, es producto de un fenómeno natural que se ha dado en toda la costa del Pacífico desde Alaska hasta Argentina", recalcó.
Al ser consultado sobre el estudio técnico encargado por el Gobierno, Sandoval planteó que "si alguien tiene alguna duda es bueno que se explicite por terceras partes. Nosotros estamos absolutamente seguros que esto fue bien hecho, fue hecho a 130 kilómetros de la costa".
Sandoval manifestó su preocupación por la situación actual en Quellón, "que es donde está la mayor cantidad de plantas de proceso que tiene la industria y donde está la mayor cantidad de viveros, ahí hay dos mil toneladas de salmón que están sin alimentar hace 14 días, entonces la situación, a pesar del avance en algunas cosas, sigue siendo crítica para nosotros".
"Los trabajadores ya han manifestado que quieren una solución pronta al conflicto para poder volver a su fuente de trabajo", aseveró.
