Vivimos "un proceso de renovación profunda en nuestra relación", recordó la Mandataria.
Mandataria extendió una invitación al Papa Benedicto XVI a visitar Sudamérica.
En un discurso posterior al encuentro con el Papa Benedicto XVI en Roma, la Presidenta Michelle Bachelet se mostró satisfecha por la relación bilateral con Argentina y sostuvo que la paz firmada hace 25 años por el Canal de Beagle "ha dado frutos".
"Hoy, a 25 años del Tratado de Paz y Amistad podemos decir jubilosos, con seguridad y con alegría, que la paz ha dado sus frutos en abundancia y que nuestros pueblos viven muy contentos en esta atmósfera de concordia y comprensión", indicó.
"No sólo nos quedamos con el Tratado de Paz y Amistad, sino que luego iniciamos con el retorno a nuestras democracias un proceso de renovación profunda en nuestra relación bilateral transitando a una relación de fraternidad, de cooperación, de integración asentada en una convicción muy profunda de que el desarrollo de nuestros pueblos se encuentra estrechamente ligada a los valores de la democracia, de los derechos humanos, de la paz, de la prosperidad entre nuestros países de la región y por cierto entre nuestros países vecinos", enfatizó.
Asimismo la Mandataria extendió una invitación al Papa Benedicto XVI a visitar Sudamérica, pero no hubo respuesta del Pontífice.
Por su parte, el secretario de Estado del Vaticano, el cardenal Tarcisio Bertone, confirmó que llegará a Chile en abril de 2010.
ArgentinaEn la misma línea que Bachelet, la presidenta argentina Cristina Fernández señaló que el viaje se realizó para "recordar, como argentinos y chilenos y agradecer aquél gesto, pero también para poner como testimonio de lo que el mundo actual necesita: mediadores. ¿Y qué es un mediador?, alguien que no está ni de un lado ni del otro, sino del lado de la paz".
Más tarde Michelle Bachelet se refirió a la audiencia individual que tuvo con el Pontífice y en el Instituto di Santa Maria Bambina, frente a la plaza San Pedro, manifestó que conversaron respecto de los tratados y que deben ser "como un ejemplo para el conjunto de la región y para el mundo en general".
La nota alta de la jornada la dio el periodista argentino Julio Algarañez, quien intentando descansar un poco en plena audiencia con el Papa se apoyó en un jarro de porcelana fina y lo rompió, provocando un gran ruido.
