Un estudio reveló cómo ha cambiado la maternidad en las mujeres en los últimos 40 años, en los que se ha consagrado el derecho de las mujeres a decidir cuándo ser madre.
Según datos de la Tasa Global de Fecundidad y el Instituto Nacional de Estadísticas (INE), en la década de los 60, en promedio las chilenas tenían cinco hijos y al 2018 este número bajó a 1,6. En tanto, las edades también cambiaron, ya que en 1978 las mujeres tenían hijos entre los 20-24 años, y en 2018 esto se desplazó a los grupos entre los 25-29 y 30-34 años, confirmando que las mujeres tienen hijos a edades más tardías que hace 40 años.
La clínica IVI, especializada en reproducción asistida, reveló que muchas mujeres optan por la conservación de los óvulos para su uso futuro, lo que es posible gracias a la técnica de la vitrificación, una forma de congelación a -196ºC, manteniendo intactas sus características.
Esta es una tendencia al alza debido a factores como la preferencia por el desarrollo profesional de las mujeres, postergando la decisión de ser madre hasta los 35 años, edad en la que la fertilidad es limitada y desciende de forma muy marcada en cuanto a la calidad de los óvulos. Por ejemplo, después de los 40 años, la posibilidad de un embarazo es menor al 10 por ciento.
El especialista en reproducción asistida de IVI, Andrés Carvajal, explicó que "si una mujer decide preservar o congelar sus óvulos cuando estos son aún jóvenes, en el momento en el que decida tener un bebé podrá utilizarlos y así tener las mismas probabilidades de embarazo que hubiera tenido en el momento de la preservación".
"La edad de las pacientes que más recurren a la vitrificación es entre 35 y 39 años, pero se recomienda hacerlo a una edad más temprana", señaló el médico, quien aseguró una tasa de éxito de hasta el 95 por ciento para los óvulos que conservan las mismas características que uno recién sacado.
