Esta versión fue planteada por Francisco Labbé, ex director del INE, para justificar los errores del proceso.
Economistas apuntan a la necesidad de consolidar esta institución y autonomizarla.
"No hubo ningún complot", dijo el timonel gremialista, Patricio Melero.
El presidente de la UDI, Patricio Melero, restó validez a los dichos del ex director del INE Francisco Labbé, quien aludió a un supuesto "boicot político" al interior de la institución para justificar los errores que se produjeron en la planificación y ejecución del Censo 2012.
"Aquí no hubo ningún complot por afectar un censo", dijo Melero en el Palacio de La Moneda tras participar en la habitual reunión del comité político de los lunes, marcada por los problemas del estudio de población y las últimas declaraciones de Labbé.
"Yo creo que hay decisiones que afectaron el resultado, y hay un primer informe que es muy negativo", añadió Melero, quien consideró "razonable esperar una segunda visión de un organismo independiente, como lo ha estado planteando el Gobierno para tomar una decisión final de si se justifica o no hacer un nuevo censo, o si es rescatable parte de la numerosa información que el censo que se realizó arrojó".
A primera hora, en Cooperativa, el ministro del Interior, Andrés Chadwick, también desechó la tesis del "boicot político" planteada por Labbé.
La ministra vocera Cecilia Pérez, en tanto, defendió las acciones adoptadas por el Gobierno en este caso y señaló que La Moneda "no comparte" la manera en que Francisco Labbé ha hecho sus planteamientos.
Opinan los economistas
La polémica del censo también fue tema de debate entre los miembros del Grupo de Política Monetaria: cinco expertos de diversos centros de estudio que analizan datos como crecimiento, desempleo, inflación y recomiendan al Banco Central tomar decisiones respecto a la tasa de interés.
Los economistas se sumaron a las críticas al proceso, que, dijeron, grafica la necesidad de contar con un INE autónomo.
"Hemos visto que hay instituciones que están consolidadas y bien desarrolladas, como un Banco Central independiente, con una regla fiscal, que son muy valiosas desde el punto de vista de la proyección y al estabilidad económica del país, y hay otras instituciones que no están a la altura todavía; es como una economía adolescente, donde hay un desarrollo todavía desarmónico entre las distintas partes. Ahora hicimos un censo y lo hicimos mal, y nos damos cuenta de que tampoco esa institución estaba a la altura y hay que perfeccionarla", dijo el economista de Gemines Consultores Tomás Izquierdo.
El economista y ex Superintendente de Valores y Seguros Guillermo Larraín, criticó, en tanto, que Labbé haya puesto en entredicho "la trayectoria de personas como Osvaldo Larrañaga o David Bravo", quienes "son profesionales de primer nivel, independientes, y que velan por las instituciones", dijo.
"Creo que es una pequeñez atribuir a una suerte de conflicto de interés que podría tener David Bravo como director del Centro de Microdatos la evaluación que haga del INE. Es bien lamentable esa opinión que ha dicho el ex director" Labbé, indicó Larraín.
