El arzobispo de Santiago evitó profundizar sobre el cuestionado sacerdote.
Insistió que todo lo que debía decir está en la carta entregada el fin de semana.
El arzobispo de Santiago, cardenal Francisco Javier Errázuriz, desestimó este jueves referirse nuevamente al caso que enfrenta el sacerdote Fernando Karadima, ex párroco de la Iglesia del Sagrado Corazón de Jesús de El Bosque, acusado de responsable de supuestos abusos sexuales.
"Me pareció que era lo fundamental que había que decir, lo escribí en una carta. Quise entregar con toda transparencia antecedentes de este proceso", dijo Errázuriz en alusión a la misiva que entregó el fin de semana a las iglesias del país y que fueron leídas durante la misa del domingo.
El arzobispo insistió en que "hay que ir a lo sustancial, me parece que hay que rezar para que se logre encontrar la verdad, para que se tomen las medidas del caso, pero no hacer de esto una nueva diversión mediática, no tiene sentido".
De esta forma intentó zanjar las críticas que aluden a la demora de la iglesia en el proceso de investigación que fue congelado en 2005 y recién hace una semana se hizo público.
