La empresa HM Seguridad Spa afirmó que el guardia que terminó facilitando el robo que afectó al Ministerio de Desarrollo Social lo hizo "de buena fe" tras haber sido engañado mediante una supuesta videollamada con el ministro Giorgio Jackson (RD).
Durante esta jornada, tras el hecho ocurrido anoche, se conoció que los ladrones habían realizado dos llamadas fingiendo ser el titular de la cartera: con la primera, lograron que los guardias reunieran 23 notebooks y se los entregaran; y con la segunda, que los dejaran entrar presuntamente a "fumigar", gracias a lo cual sustrajeron una caja fuerte.
Los computadores fueron recuperados esta tarde, en la vía pública en la comuna de Renca, mientras el paradero de la caja aún es desconocido.
En este marco, la empresa salió en defensa de su trabajador, quien relató que, luego de que llegara una llamada a la recepción del Ministerio, le pidieron su número personal y le hicieron una videollamada con la que, supuestamente, lo convencieron de que se trataba del ministro Jackson.
Un sujeto, en la llamada inicial, "le pide el teléfono al guardia y le hace una videollamada por WhatsApp: ante ese evento, ante los ojos del guardia, a través de la videollamada, no le quedan luces (de extrañeza) de que es el ministro", sostuvo el abogado Cristián Aros, en representación de la firma.
"Todos lo conocemos, que es pelado, calvo, y tiene ciertas características (reconocibles); y, a través de una videollamada, no le pareció raro", puntualizó, resaltando que "este guardia trabaja con nosotros desde hace mucho tiempo".
Insistió que "no le cupo duda de que era él (Jackson) quien estaba al otro lado de la llamada, y si lo está llamando el ministro, la máxima autoridad del lugar, le pareció que comprometía una situación de apuro".
Por ello, "de buena fe, en todo sentido, quiso ayudar", afirmó Aros.
La empresa, que se adjudicó una licitación para encargarse de la seguridad de las dependencias del Ministerio en 2021 -cuando Karla Rubilar era ministra, en Piñera II-, no cumplió sus obligaciones para el control de los ingresos de personas.
Desde el Gobierno, además, el subsecretario de Prevención del Delito, Eduardo Vergara, constató que los guaridas de la compañía "tenían unos cursos pendientes (...) de actualización de la labor de seguridad".
