La convencional aseguró que al momento de su detención un funcionario policial "puso sus manos en mi cuello ahorcándome".
La involucrada en el hecho admitió que tuvo una discusión verbal con su pareja, pero indicó que "jamás hubo golpes o agresiones físicas".
Tras ser detenida en un contexto de presunta violencia intrafamiliar y daños, la convencional constituyente Tiare Aguilera acusó este domingo violencia de Carabineros en el operativo y descartó ser culpable de esos cargos.
A través de un comunicado, Aguilera detalló que los hechos se dieron "luego de una discusión verbal con mi pareja en nuestro departamento", asegurando que el hombre salió a caminar y que "jamás hubo golpes o agresiones físicas".
"Al salir a buscarlo para pedirle que conversemos se me cerró la puerta de entrada del edificio, con el celular sin carga y sin llaves. Nunca salí a la calle, me mantuve todo el tiempo en el espacio del edificio, que no tiene nochero", destacó la convencional.
Debido a esto, explicó que "en la desesperación de tratar de entrar porque mi hijo de 4 años estaba solo durmiendo en su pieza, forcejee la puerta de entrada, lo que hizo que la mampara de vidrio se trizara. Fui al auto a ver si había alguna llave o cargador de celular y en ese momento sentí muchos carabineros entrando con linternas al edificio y al estacionamiento".
"Me asusté, porque pensé que me iban a confundir con un ladrón por la trizadura del vidrio, y me quede cerca del auto. En eso se acercan 6 carabineros, a los que les intento explicar lo que había sucedido y que necesitaba entrar para saber cómo estaba mi hijo. En ningún momento me dejan subir, me señalan que me van a detener por los daños a la mampara y por haber dejado solo a mi hijo", puntualizó Aguilera.
Tras esto, relató que los uniformados la detuvieron "violentamente" y burlándose de su situación, sin darle una explicación de quién se haría cargo del menor. En esta línea, denunció que "me esposaron con mucha fuerza y un carabinero puso sus manos en mi cuello ahorcándome hasta hacerme subir al vehículo".
La constituyente detalló que estuvo más de una hora sin saber qué pasaba con su hijo -que finalmente se quedó con un hermano de ella- y el motivo de su detención, siendo liberada durante esta mañana "tras un reclamo interpuesto en la comisaría por malos tratos por parte del personal de Carabineros y tras recibir escuetas disculpas de altos mandos de la prefectura correspondiente".
"Es importante señalar que la constatación de lesiones realizada en el centro de urgencia de Ñuñoa, indica únicamente lesiones en la piel del cuello producto del ahorcamiento por parte del carabinero que me detuvo", destacó la involucrada, quien señaló también que "llevamos años trabajando en la erradicación de la violencia intrafamiliar y nos duele profundamente la distorsión de los hechos ocurridos".
"Ningún ciudadano merece ser tratado así por los funcionarios que supuestamente debieran protegernos", lamentó la convencional.
