El presidente del PS se reunió con los parlamentarios del partido para abordar el enfrentamiento abierto con la vocera de Gobierno.
Fernández y Elizalde estuvieron enfrentados en las polémicas elecciones internas.
Con un aplauso terminó la reunión almuerzo que sostuvo el presidente del Partido Socialista, Álvaro Elizalde, con los diputados y senadores de su colectividad para abordar la situación de la relación cortada con el Gobierno desde que la vocera Cecilia Pérez arremetiera contra el partido hablando de los vínculos con el narcotráfico.
Tras el encuentro, el senador Elizalde confirmó que se mantendrán las medidas de presión al Ejecutivo -veto a subsecretarios y asesores para que no puedan ingresar a las sesiones de la Sala y de comisiones- así como también seguir adelante con la acusación constitucional contra la ministra Cubillos y con las gestiones para que eventualmente sea aprobada.
"Estamos unidos. Eso no obsta que este es un partido democrático, tenemos puntos de vistas que son diferentes, pero cuando se produce un ataque de esta naturaleza, nosotros aquí estamos defendiendo un principio fundamental, una convicción: tenemos que cuidar la convivencia democrática y el principal responsable de cuidar la convivencia democrática es el Gobierno", dijo Elizalde.
En tanto, la diputada Maya Fernández, rival de Elizalde en las accidentadas elecciones internas en las que se conoció sobre los eventuales nexos de militantes con el narcotráfico, ironizó con los dichos de Cecilia Pérez.
"La ministra tuvo un logro: logró una foto mía con Elizalde el día de hoy. La ministra logró que el PS se sentara a la mesa, conversara, se uniera para defender al PS, que es lo que corresponde", añadió.
En tanto, las bancadas de diputados de la oposición sostienen una reunión donde los socialistas están entregando los fundamentos y el borrador de la acusación constitucional, que pretenden que sea apoyada por todas las fuerzas, incluso por el Frente Amplio.
