Fernando Díaz señaló que "hay que ir caminando muy lentamente" para encontrar soluciones.
Recalcó que el problema va más allá de promesas sobre aplicar o no la Ley Antiterrorista.
El Vicario de la Pastoral Indígena, Fernando Díaz, cuestionó la forma en que algunos candidatos presidenciales han enfrentado públicamente el denominado conflicto mapuche.
"En los tiempos de campaña se hacen ofertones de distintos lados. Nosotros sabemos que este es un problema donde hay que ir caminando muy lentamente porque las demandas de los mapuches no son demandas de una comunidad de campesinos simplemente, es un pueblo, con historia, con identidad", afirmó el sacerdote a El Diario de Cooperativa.
"La misma Iglesia (Católica) para el año del Jubileo tuvo que reconocer, y entre las cosas que hizo es pedir perdón por su silencio cuando el pueblo mapuche fue integrante violentamente al territorio nacional y esa herida está siempre presente", sostuvo.
En ese marco dijo que es criticable "empezar a decir yo aplico la Ley Antiterrorista, yo no lo aplico, yo no la voy aplicar". "El pueblo mapuche no puede estar en la bandeja de las ofertas", sentenció.
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| La violencia en La Araucanía preocupa a la Iglesia Católica. (Foto: UPI) |
Una percepción complejaSegún indicó Díaz, éste es un tema cuya solución final tiene aún tiene larga espera por delante y recordó que "todos los gobiernos chilenos han tenido que legislar, porque no es un problema que se haya solucionado ni se vaya a solucionar de una sola vez, ya que aquí hay percepciones".
"Está la percepción de los dueños de las tierras o de la empresas y está la percepción de las comunidades mapuches que es mucho más compleja, que por un lado quiere participar, pero por otro lado se siente agredido", agregó.
"La realidad del pueblo mapuche es mucho más compleja, es una historia de lucha, de trabajo, de esfuerzo por salir adelante por superar especialmente las condiciones de pobreza, de marginalidad, de injusticia, entonces la realidad del pueblo mapuche tiene que ser contextualizada y la realidad de violencia tiene sus dos lados", dijo.
El vicario aseguró que la Iglesia Católica "está preocupada de cómo se van solucionando estos problemas, las tensiones, los momentos más críticos, ayudando al pueblo mapuche a fortalecerse en su búsqueda de una participación más justa en la realidad nacional".
"La Iglesia no es que esté haciendo una opción por una determinada forma de pueblo o de participación sino que está abriendo los canales para el diálogo y para esa participación, (siempre con) una mirada integral", señaló.
Recalcó que "la Iglesia chilena ya lleva muchísimos años dialogando y buscando que el pueblo mapuche sea reconocido, que lel Estado) o considere en su condición de pueblo, con sus demandas, con sus derechos a territorio, a autodeterminación, a un reconocimiento constitucional".
