El sujeto aprovechaba que la víctima se quedaba sola en su casa para violentarla.
El Tribunal Oral en lo Penal de Arica condenó a un hombre a dos penas de cinco años y un día de cárcel efectivo por los delitos de abuso sexual y violación contra una menor de 14 años ocurridos entre los años 2010 y 2011 en la capital regional.
La justicia acreditó, más allá de toda duda razonable, que en ese periodo el acusado aprovechó que la víctima se encontraba sola mientras su mamá había salido de compras y le realizó actos de relevancia y significación sexual. Esta situación se reiteró en tres oportunidades distintas, cada vez que la niña llegaba a ese domicilio de visita.
De igual manera se acreditó que en 2015, el acusado regresó a Arica de vacaciones, quedándose en el mismo inmueble, donde la víctima se encontraba viviendo de allegada a una pieza, instante en que procedió a violarla.
En fallo unánime, el juzgado dispuso que se proceda a la toma de muestras biológicas del sentenciado para determinar su huella genética e inclusión en el registro nacional de ADN de condenados.
