Los artesanos que ocupan las pagodas de Calle Bulnes, en Temuco, se manifestaron en el centro de la ciudad ante la decisión del municipio de no renovarles el permiso para trabajar este año.
"Nuestros permisos para el mes de febrero fueron paralizados y no sabemos por qué. Llevamos 30 años acá en la calle", dijo Juan Carlos Gutiérrez, dirigente de los comerciantes.
"Nuestros permisos fueron retenidos unilateralmente porque no aceptamos la propuesta del municipio, que es enviarnos a una automotora, porque no hay un plan de financiamiento para mejorar las instalaciones", agregó el vocero.
Adriana Espinoza, artesana de calle Bulnes, afirmó que la medida les "afecta económicamente, emocionalmente, porque hay gente que hace más de 30 años que está en la calle".
"Que de un día para otro se le corten las alas afecta a las 18 familias, pese a que estamos en la región más pobre del país", enfatizó.
Los dirigentes no descartaron llevar esta situación a la Justicia, porque estiman que se les afecta el derecho fundamental al trabajo.
