Yini Sandoval y sus tres pequeños hijos fueron apuñalados y víctimas de un incendio intencional registrado en diciembre de 2016.
Claudio Toloza -progenitor de uno de los menores- era buscado desde entonces.
La PDI logró la detención del sospechoso en una labor conjunta con la Fiscalía regional
La Policía de Investigaciones detuvo en las últimas horas a un hombre de 28 años llamado Claudio Toloza, quien es sospechoso de haber dado muerte a Yini Sandoval y sus tres pequeños hijos -de tres, cinco y 10 años- en el sector San Antonio de Temuco en diciembre de 2016.
Según los antecedentes, la mujer y los niños fueron atacados con un arma blanca: el cuerpo de Yini Sandoval presentaba, golpes y dos puñaladas, según consignó el informe forense.
Los tres menores también presentaban lesiones, y dos de ellos murieron por asfixia cuando comenzó un incendio intencional de su casa.
El menor de 10 años falleció posteriormente en el Hospital Regional, hasta donde llegó con el 90 por ciento de su cuerpo quemado.
Ahora: Jefe de la Brigada de Homicidios #Temuco, comisario Rodrigo Pizarro, junto a fiscal Alberto Chiffelle se refieren a detención de presunto autor de homicidio e incendio con resultado de muerte de la joven Yini Sandoval y sus tres hijos.#InvestigarEstáEnNuestroAdn pic.twitter.com/JDxtG0HNzd
— PDI_Araucania (@PDI_Araucania) 5 de octubre de 2018
Aquella madrugada los vecinos de San Antonio, sector ribereño de Temuco, ayudaron a apagar las llamas, sin imaginar que, tras lo que parecía ser sólo un incendio estructural, se escondía el crimen de una madre y de tres niños.
El hecho comenzó a ser investigado por la Brigada de Homicidios de la Policía de Investigaciones, se nombró un fiscal preferente y en las últimas horas se confirmó la detención de Claudio Toloza, de 28 años, ex pareja de Yini y padre de uno de los menores fallecidos, quien fue puesto a disposición de los tribunales la mañana de este viernes.
La investigación se encuentra abierta, quedan diligencias por desarrollar en busca de esclarecer uno de los crímenes más horrendos que recuerde Temuco y La Araucanía.
