El siniestro se declaró a las 14:00 horas de este martes, decretándose alerta roja en Pinto.
Es una zona de difícil acceso y con una topografía compleja para los trabajos de combate al fuego.
Hoy se han dispuesto tres brigadas y tres helicópteros para el combate al fuego.
Más de 200 hectáreas de vegetación nativa han sido consumidas a menos de un día del inicio del incendio que afecta a la Reserva Nacional de Ñuble, en el sector Los Peucos.
El siniestro se declaró este martes cerca de las 14:00 horas, tras lo cual la Dirección Regional de la Onemi decretó Alerta Roja para la comuna de Pinto, permitiendo así la movilización de todos los recursos necesarios para el combate al fuego.
Este miércoles, la Corporación Nacional Forestal (Conaf) dispuso desde temprano una brigada helitransportada y el arribo de tres brigadas terrestres al mediodía, que realizan reforzamientos de líneas de control y liquidación de puntos calientes, sumándose así a los esfuerzos de combate aéreo a través de un helicóptero de Conaf y tres helicópteros de la Onemi que operan en la zona.
"Por protocolo se activa una Alerta Roja comunal, porque es el protocolo para cualquier siniestro que ocurre dentro un área silvestre protegida. Es bosque nativo, a veces de lento avance, pero con una extinción bastante lenta. Hace algunos años tuvimos unos que demoraron semanas en ser extinguidos", señaló el intendente Martín Arrau.
"Nos preocupa mucho, porque es una área silvestre protegida de alto valor ecosistémico", enfatizó.
Asimismo, Arrau afirmó que se trata de un "llamado de alerta de lo que puede ser la temporada de incendios de este año".
Continúan las labores de combate en #IFReservaÑuble, comuna de Pinto, #Ñuble
— incendiosforestales_CONAF (@incendios_CONAF) November 4, 2020
Consume una superficie preliminar de 209 ha de vegetación natural.
En el lugar trabajan 4 brigadas terrestre, 1 técnico y 1 helicóptero de #CONAF, junto a 3 helicópteros de @onemichile pic.twitter.com/P4ke7sV8xb
Domingo González, director regional de Conaf, señaló a Cooperativa que "se trata de un incendio de alta complejidad, por acceso y distancia, además de los problemas que genera la topografía abrupta del lugar, generando que el desplazamiento de las brigadas terrestres y las operaciones sean difíciles".
Agregó que "lo anterior se suma a condiciones lugares propias de la alta cordillera que complican como la velocidad de vientos en sectores encajonados, con dirección cambiante, y la acumulación de la cantidad de material combustible que existe por causa de la sequía en esa zona".
