Buscan proteger al monumento histórico de incendios, deterioros y daños por terceros.
El puente, lugar de fusilamiento durante la dictadura, fue declarado Monumento Nacional en 2016.
El Puente Confluencia fue declarado Monumento Nacional por decreto del 24 de agosto de 2016.
Autoridades y vecinos elaboraron un plan para resguardar y proteger el Puente Confluencia, de Chillán, que fue declarado como Monumento Nacional hace ya tres años.
Karin Cárdenas, encargada de Unidad de Patrimonio del Municipio, señaló que "la propia comunidad es la que ha solicitado estas coordinaciones, lo que demuestra que su compromiso sigue vigente, y a nosotros nos impulsa a apoyar estas gestiones en favor de esta infraestructura y su entorno".
El secretario técnico del Consejo de Monumentos Nacionales, Erwin Brevis, agregó que "destinaremos nuestra capacidad para determinar el estado real de conservación del puente, lo cual permitirá generar un diagnóstico que será empleado para determinar los siguientes pasos en cuanto a su gestión y protección".
Para la seremi de Cultura, María Soledad Castro, esto debe ir de la mano con "el avance de la nueva ley de patrimonio cultural, y así poder tomar decisiones con mayor rapidez y pertinencia a nuestra realidad regional".
Monumento Nacional
La construcción del Puente Confluencia ha sido atribuida a Gonzalo Urrejola Unzueta, Ministro de Obras Públicas, posterior al año 1910, siendo reparado dos décadas más tarde y manteniéndose hasta hoy su carpeta de madera.
En términos de memoria histórica, el puente fue un lugar de fusilamiento de detenidos durante la dictadura militar, y en el Informe Rettig aparece registrado que Orlando Riffo, obrero y presidente de la Junta de Vecinos de Confluencia en esa época, fue detenido el 18 de septiembre de 1973 y asesinado por agentes del Estado, siendo su cuerpo encontrado en un sector aledaño al puente.
El puente fue declarado Monumento Nacional por decreto del 24 de agosto de 2016.
