Un comité de la Cámara Baja de Estados Unidos aprobó este miércoles un proyecto de ley para financiar el Departamento de Seguridad Nacional (DHS, en inglés) que incluye la retirada de fondos para el programa de exención de visados de Chile.
La medida, aprobada por 33 votos a favor frente a 25 en contra, incluye una enmienda que impide el uso de fondos para procesar la entrada de ciudadanos chilenos a través de este programa hasta que las autoridades de nuestro país compartan datos sobre los antecedentes penales de las personas que viajan a EE.UU.
La enmienda se incluyó en la propuesta de presupuesto para el DHS después de que el presidente de la Cámara Baja, el republicano Kevin McCarthy, criticara el programa de exención de visados para Chile durante un discurso en California la semana pasada.
Según McCarthy, muchos ciudadanos chilenos que entran en el país norteamericano a través de este programa pertenecen a redes de crimen organizado que cometen atracos en hogares y negocios californianos.
Retirar a Chile del programa de exención de visados, según el republicano, permitiría a las autoridades estadounidenses comprobar los antecedentes penales de los viajeros chilenos que entran en el país.
Chile es el único país latinoamericano que forma parte del programa de exención de visados estadounidense pero, a diferencia de otras naciones que también forman parte del programa, las autoridades chilenas no permiten la verificación de los antecedentes penales de los viajeros.
Desde hace tiempo, políticos estadounidenses de ambos partidos han avisado de que hay redes criminales que aprovechan esta situación para atacar empresas en California y otros lugares.
Según el Servicio de Control de Inmigración y Aduanas de Estados Unidos, de los países que pertenecen al programa, Chile es el que registró el mayor número de deportados en 2022.
El año pasado, de acuerdo al organismo norteamericano, fueron deportados un total de 553 chilenos, lo que representa un aumento del 119,4 por ciento con respecto a 2021.
Tales cifras llevaron al canciller Alberto van Klaveren, hace unos días, a lamentar que "un grupo de delincuentes" ponga en peligro la permanencia del país en el programa estadounidense.
"POSICIÓN ANTICHILENA"
En Chile, el senador de la Unión Democráta Independiente (UDI) Iván Moreira calificó de "verdadero chantaje" y de "actitud violenta" la posición del Partido Republicano estadounidense y añadió que la situación "generará una polémica política".
"Lo que buscan es hacerle daño a un país chico como Chile, que acaba de celebrar 200 años de una muy buena relación con Estados Unidos", lamentó el congresista opositor, quien también es miembro de la Comisión de Relaciones Exteriores de la Cámara Alta.
Desde el oficialismo, el presidente de la Comisión de Relaciones Exteriores de la Cámara Baja, el diputado Tomás de Rementería (Partido Socialista), aseveró que "acá lo importante es lo que va a trabajar el Departamento de Homeland Security (Seguridad Nacional), que ha dicho que Chile cumple las condiciones y es muy probable que tengamos noticias pronto de una renovación de este programa".
"Me parece que es gravísimo que el señor McCarthy y los diputados republicanos estén en esa posición antichilena y creo que el Gobierno debe hacer una queja sobre eso", apuntó el legislador.
Por su parte, el diputado Raúl Soto (PPD), integrante de la comisión y expresidente de la Cámara Baja, subrayó que la Visa Waiver es "un beneficio que hay que buscar mantener".
"El Gobierno debe hacer los esfuerzos, a través de la Cancillería, para lograr un acuerdo con Estados Unidos que permita que los chilenos sigan contando con esta visa pero, al mismo tiempo, tomar los resguardos necesarios para asegurar a Estados Unidos que se va a utilizar de manera correcta", añadió el parlamentario.