El procurador peruano anticorrupción, Antonio Maldonado, dijo que el Gobierno de Chile tiene "una gran responsabilidad" en el caso del ex presidente Alberto Fujimori, ya que debe garantizar que el político no se fugue del país, donde espera la resolución de un pedido de extradición.
Maldonado consideró "un error" la decisión de la Corte Suprema de Chile, que el pasado jueves otorgó la libertad bajo fianza a Fujimori, tras poco más de seis meses de detención.
El procurador reiteró que "hay un peligro de fuga real y justificado por los antecedentes de la persona y el contexto del caso", al referirse a los delitos que se imputan al extraditable.
Fujimori fue detenido en Chile en noviembre de 2005, cuando llegó sorpresivamente desde Japón, su segunda patria y donde se refugió en 2000, tras renunciar al poder a través de un fax, luego de quedar al descubierto una gigantesca red de corrupción liderada por su entonces asesor, Vladimiro Montesinos.
El ex gobernante (1990-2000) está acusado en Perú de 10 delitos de corrupción y dos de violación de los derechos humanos.
Maldonado viajó a Santiago el jueves 18 de mayo, para reunirse con el embajador peruano en Santiago, José Antonio Meier; y con el ministro chileno del Interior, Andrés Zaldívar.
Para el procurador, al ex gobernante "le basta subirse al automóvil de un embajador amigo o tomar el té con un amigo embajador y quedarse allí".
No obstante, subrayó que si Fujimori sale de Chile de forma clandestina "podría ser detenido en Perú o en cualquier otro país porque hay una orden de captura internacional vigente".
También admitió la posibilidad de que regrese a Japón, aunque acotó que este escenario es "inimaginable" porque que tendría "consecuencias delicadas en las relaciones políticas y diplomáticas" entre Chile, Perú y Japón. (EFE)