Pepe Auth junto a vecinos del edificio "Don Tristán" hicieron la petición.
El Ministerio de Vivienda se hará cargo de daños en casas sociales.
Pasado más de un mes luego del terremoto que afectó a la zona centro-sur del país, aun se mantienen los conflictos entre propietarios de departamentos en edificios con daños estructurales y las empresas inmobiliarias, por eventuales indemnizaciones.
Un grupo de propietarios del edificio Don Tristán de Maipú aseguran que aun no han llegado a acuerdo con la empresa Mujica y González y le pidieron al presidente del Consejo de Defensa del Estado (CDE) hacerse parte de este proceso judicial.
"El presidente Carlos Mackenney nos señaló que el Consejo no había definido su postura y estaban analizando la argumentación que nosotros le planteamos. La clave consiste en verificar si el interés del Fisco se vio afectado directa o indirectamente", señaló el diputado por Maipú, Pepe Auth (PPD), quien se sumó a esta petición.
Pero este no es el único caso, pues los vecinos del edificio Emerald, señalaron que la empresa Paz Corp ya ha realizado tres propuestas de solución, aunque para ellos, todas son desventajosas.
"Paz Corp, pese a mostrarse muy cercana y muy propicia a dar soluciones, en el momento que la gente tenía que ir a firmar sus contratos con los acuerdos a los que habían llegado, estos eran abusivos, porque la gente perdía plata, tenían que ceder su seguro y renunciaban a toda acción judicial que pudieran seguir", manifestó Marta Ramos, presidenta de la asociación de consumidores inmobiliarios.
Por su parte, la ministra de Vivienda, Magdalena Matte, aseguró que será esa cartera la que responderá por lo daños en casas sociales.
"Vamos a responder como corresponde a un ministerio. Vamos a responder con el 100 por ciento de los daños y vamos a reconstruir para que tengan una vida digan y puedan superar este tremendo dolor y problema que han tenido", aseguró la autoridad.
Restauración de iglesias
Según el catastro de la Iglesia Católica, 38 templos se encuentran con daños tras el terremoto, 18 de ellos están inhabilitados parcial o totalmente, por lo cual el obispo auxiliar de Santiago, Fernando Chomalí llamó a los privados ayudar en la reconstrucción.
"Lo que queremos hacer es una gran corriente de solidaridad hacia la Iglesia Católica, de manera que las empresas que estén trabajando en Santiago puedan colaborar activamente en esta tarea titánica que es reconstruir las iglesias, muchas de las cuales son patrimonio cultural", manifestó el cura.
El presupuesto que tiene el Arzobispado de la Región Metropolitana es cuatro veces menor a los gastos que debe cubrir la Iglesia para reparar los daños del terremoto.
El alcalde de Santiago, Pablo Zalaquett (UDI), descartó la posibilidad de recibir dinero de la intendencia, por lo que llamó al Gobierno central a colaborar en la recuperación del patrimonio religioso.
"La intendencia no tiene fondos y esta sobrepasada en su situación por lo tanto hay que buscar recursos en el Gobierno central, en las empresas entre las personas. Hay que hacer campaña, pedir colectas", señaló.
La Basílica del Salvador, la Parroquia San Saturnino y la iglesia María Auxiliadora son algunas de las iglesias más dañadas en la Región Metropolitana.
