El transbordador no pudo aprovechar las dos opciones de aterrizaje en Cabo Cañaveral por el mal tiempo reinante en Florida y ahora prepara su regreso en la Base Edwards, en el desierto de Mojave.
El transbordador espacial estadounidense Discovery buscará en California la tercera oportunidad de aterrizaje después que la NASA suspendió dos veces los intentos de retorno a Florida debido a las condiciones meteorológicas desfavorables.
La agencia espacial estadounidense suspendió el pasado lunes 8 de agosto dos intentos de aterrizaje en el Centro Espacial Kennedy, en Cabo Cañaveral, por las nubes y las lluvias, pues el transbordador desciende como un planeador y no puede, como un avión, desviarse a otro aeropuerto.
Esta madrugada hubo dos oportunidades de descenso en Florida, pero continuaban las lluvias y las nubes cargadas de electricidad en un radio de 50 kilómetros alrededor de Cabo Cañaveral.
Por ello, el control de misión en el Centro Espacial Johnson, en Houston, Texas, comunicó a la comandante del transbordador, Eileen Collins, que se optaba por el aterrizaje en California.
En ambas ocasiones, los siete tripulantes del Discovery ya habían completado la preparación para el descenso, una operación dirigida por computadoras y durante la cual la nave irrumpe en la atmósfera a una velocidad de cerca de 26.000 kilómetros por hora, y la fricción lleva la temperatura a 1.300 grados Celsius en el vientre del transbordador.
La próxima oportunidad de aterrizaje en la base Edwards de la Fuerza Aérea, en el desierto californiano de Mojave, y comienza a las 11:06 GMT (07:06 horas de Chile), de forma que la nave tocaría tierra a las 12:12 GMT (08:12 horas de Chile), unos 23 minutos antes del amanecer en California.
Las condiciones meteorológicas en Mojave eran propicias para la llegada del Discovery, pero su arribo allí significa que luego la NASA deberá gastar aproximadamente cinco millones de dólares y una semana de preparativos para trasladarlo, montado sobre un avión Boeing 747 modificado, hasta Florida.
Si alguna razón técnica interfiere con el primer intento de aterrizaje en Mojave, el Discovery tendrá otra oportunidad para el descenso a partir de las 12:44 GMT (08:44 horas de Chile) con una llegada a la pista a las 13:47 GMT (09:47 horas de Chile).
La del Discovery es la primera misión desde que el 1 de febrero de 2003 el Columbia se desintegró sobre Texas y Louisiana cuando retornaba a Cabo Cañaveral al término de un viaje de 16 días. En la catástrofe murieron siete astronautas.
Durante nueve días, la nave estuvo atracada en la Estación Espacial Internacional (ISS), a 385 kilómetros de la Tierra, a donde llevó seis toneladas de equipos y suministros, y desde donde trae tres toneladas de desechos y aparatos en desuso.
La misión ha incluido una reparación sin precedentes en órbita, durante la cual el astronauta Stephen Robinson fue llevado por el brazo robótico de la ISS hasta cerca del vientre del Discovery, de donde quitó dos pequeños trozos de relleno que sobresalían entre las losetas de aislamiento térmico.
La NASA decidió que no presenta mayores problemas para el retorno seguro un trozo de tela aislante rasgado debajo de la ventanilla de babor en la cabina del Discovery, junto el puesto de la comandante Collins.
La destrucción de Columbia fue el resultado de la irrupción en la nave de gases atmosféricos incendiados en rupturas del sistema de aislamiento térmico, causadas por el desprendimiento de trozos de espuma aislante del tanque de combustible exterior durante el lanzamiento.
A raíz de esto, la NASA observó con más de un centenar de cámaras el lanzamiento de la nave el 26 de julio, y una cámara montada sobre el tanque exterior de combustible documentó el desprendimiento de trozos de espuma aislante que, aparentemente, no dañaron al transbordador.
Sin embargo, la agencia espacial impuso una moratoria en las futuras misiones de transbordadores hasta que se resuelva el problema de la espuma aislante.
El transbordador Atlantis ya está adosado a su tanque exterior de combustible, y tenía fijada la fecha para el lanzamiento en septiembre, pero ahora la NASA no está en condiciones de asegurar cuándo se reanudarán los vuelos de estas naves espaciales, una generación que debutó en 1981. (EFE)
