El verano es sinónimo de descanso y alegría, y en Pequeño Cottolengo Cerrillos también es una oportunidad para reafirmar su compromiso con la inclusión y la calidad de vida.
Desde el inicio de la temporada, los residentes de la Ciudad Inclusiva de Cerrillos disfrutan de vacaciones en la residencia de El Tabo y en el sur del país, en lugares diseñados para satisfacer sus necesidades físicas, emocionales y sociales.
La Organización Mundial de la Salud (OMS) destaca que las actividades recreativas pueden mejorar en un 40% el bienestar emocional y en un 25% las habilidades sociales de las personas con discapacidad. Por ello, estas vacaciones no solo ofrecen alegría, sino que fortalecen la autonomía, integración y sentido de pertenencia de los residentes.
Residencia Adaptada en El Tabo
Ubicada a pocos metros de la playa, la residencia de El Tabo cuenta con rampas de acceso, espacios amplios y sillas de ruedas especiales para arena. El lugar está completamente equipado, desde ropa de cama hasta sombrillas, para garantizar el disfrute pleno de los residentes.

Equipo de profesionales al servicio del bienestar
Gracias al Modelo de Gestión Integral de la Fundación (GESIN), que integra áreas como salud, rehabilitación, educación y desarrollo social, cada actividad es segura y contribuye al bienestar integral de los residentes.
Al llegar, los profesionales aseguran que todo esté listo, limpio y sanitizado. Cada grupo cuenta con auxiliares de trato directo, enfermeros para la administración de medicamentos y kinesiólogos para apoyar a quienes tienen dificultades respiratorias.
El equipo de cocina planifica menús adaptados a las necesidades nutricionales de cada residente, mientras que los suministros se gestionan con antelación para asegurar una estancia cómoda.
Un desafío que crece cada año
En el verano de 2025, más de 160 residentes participan en estas vacaciones inclusivas, un 20% más que en 2024. Además, un grupo con condiciones de salud específicas viajó al sur del país para disfrutar de un entorno diferente.
"Brindar a nuestros residentes la oportunidad de disfrutar de unas vacaciones adaptadas no solo les permite vivir momentos de felicidad, sino que también mejora su bienestar emocional e integración social. Este año, hemos incluido a residentes postrados para que también puedan vivir esta experiencia maravillosa", señaló Cristián Glenz, director ejecutivo de Pequeño Cottolengo.
¡Fomentando la inclusión social y bienestar!
- Diseña espacios accesibles: Asegúrate de contar con rampas, áreas amplias y señalizaciones claras para personas con movilidad reducida o discapacidad sensorial.
- Comunica con empatía: Escucha activamente y respeta las preferencias de cada persona. Pregunta cómo puedes ayudar antes de actuar.
- Diversión sin barreras: Adapta las actividades para que todos puedan participar. La creatividad es clave.
- Celebra la diversidad: Fomenta un ambiente donde todos se sientan bienvenidos, valorados y parte del grupo.
- Involucra a la comunidad: Invita a personas de distintos entornos para promover un espíritu inclusivo.
Este es un contenido presentado por Cottolengo.