Scorsese enfrenta demanda por millonaria deuda con asesor financiero
El realizador está acusado de incumplimiento de contrato.
Kenneth Starr también asesoró a Sylvester Stallone, Wesley Snipes y Uma Thurman
El realizador está acusado de incumplimiento de contrato.
Kenneth Starr también asesoró a Sylvester Stallone, Wesley Snipes y Uma Thurman
El cineasta Martin Scorsese se enfrenta a una demanda por las deudas de 600.000 dólares (más de 323 millones de pesos) que una de sus empresas tendría pendientes con el conocido asesor financiero de las estrellas de Hollywood Kenneth Starr, detenido por un fraude de 59 millones de dólares, informó el diario New York Post.
La demanda fue presentada en un tribunal de Nueva York por encargado de recuperar los bienes de Starr, quien ha tenido en su cartera de clientes, además de a Scorsese, a los actores Sylvester Stallone, Wesley Snipes y Uma Thurman, entre otros, y quien fue detenido en mayo.
Según relata el diario, Scorsese requirió los servicios de asesoría fiscal de la empresa de Starr para una de sus productoras y acordó que le pagaría a éste un cinco por ciento de sus beneficios por "sus labores de contabilidad, administración, gestión de impuestos y otros servicios".
El contable al que Starr encomendó el trabajo acabó abandonando la compañía y se llevó a una nueva empresa a Scorsese como cliente, por lo que la firma del célebre asesor considera que el cineasta incumplió su contrato, algo con lo que coincide el perista judicial del caso contra el detenido.
La compañía de Scorsese ya ha pagado "facturas sustanciosas a la firma (de Starr), pero, si se determina que aún hay algún saldo pendiente, será rectificado", explicó al diario neoyorquino uno de los representantes del cineasta.
Starr, de 66 años, fue detenido hace cerca de dos meses por idear y perpetrar una estafa que asciende por el momento a 59 millones de dólares,(alrededor de 31 mil 700 millones de pesos) según detalló la Fiscalía federal de Manhattan cuando presentó 23 cargos en su contra relacionados con fraude y lavado de dinero con penas de hasta 20 años de cárcel cada uno.