La medida se incluye dentro de los compromisos para cumplir la "misión pública" del canal.
El documento plantea que "una televisión pública no debe restarse de la sana política que abarca a los organismos el Estado".
El directorio de TVN aprobó un documento que establece 10 compromisos para cumplir la "misión pública" del canal.
En su sesión del pasado 6 de septiembre, el directorio de Televisión Nacional de Chile (TVN) aprobó un documento que establece 10 compromisos para cumplir la "misión pública" del canal, entre ellos "transparentar remuneraciones y demás condiciones de trabajo de sus ejecutivos y rostros".
Esta medida marca un cambio de criterio respecto a la política que había manifestado el canal en ocasiones anteriores, cuando se explicaba que dar a conocer estas cifras podría dar ventaja a otras señales en una industria altamente competitiva.
De acuerdo a lo informado hoy lunes en El Mercurio, en el punto 8 del documento, el directorio del canal afirma que "una televisión pública no debe restarse de la sana política que abarca a los organismos el Estado y las empresas públicas, en cuanto a transparentar remuneraciones y demás condiciones de trabajo de sus ejecutivos y rostros".
El texto también plantea que si bien las remuneraciones "constituyen en principio un dato personal, no caben dentro de la categoría de información sensible especialmente protegida y su publicación sí cabe en la política general de transparencia de la función pública. En el caso de un canal de televisión pública -dada su misión específica dentro de la industria- debe tener también un compromiso con la austeridad".
Fiscalizar el "correcto funcionamiento de las empresas"
El directorio de TVN también apunta dentro de los 10 compromisos a que el "papel fiscalizador de los medios de comunicación a las acciones de funcionarios públicos y el uso de dineros fiscales debe representar un quehacer especial en la televisión pública".
El citado documento remarca que "este rol fiscalizador también debe abarcar el correcto funcionamiento de las empresas públicas y privadas, y denunciar toda transgresión a las normas legales que representen abusos o daños a usuarios o consumidores".
En los compromisos aprobados por el directorio figura, además, una "programación de calidad", que significa poner "altos estándares en los espacios informativos -que no debieran dar cabida a recurrir al sensacionalismo- (...) cuidar igualmente el lenguaje que emplean quienes aparecen en pantalla y se constituyen -por este mero efecto- en personalidades ejemplarizadoras para los televidentes".
Otro de los puntos se refiere a que el gobierno corporativo de la señal estatal, "más allá de cualquier representatividad puntual, debe ser profesional y preservar la sustentabilidad del medio".
