"Lo que sucedió en Charlottesville fue una tragedia y no refleja lo que piensa Estados Unidos en general", dijo Mike Pence.
Rechazó las críticas a Donald Trump por no haber condenado abiertamente a los grupos racistas.
La violenta jornada del sábado -que dio la vuelta al mundo- dejó tres personas y más de 20 heridas.
El vicepresidente de Estados Unidos, Mike Pence, calificó como "una tragedia" que no refleja el pensamiento de su país la jornada violenta que se vivió el sábado en la ciudad de Charlottesville (Virginia), donde murieron tres personas y más de 20 resultaron heridas durante una marcha de blancos supremacistas.
"Lo que sucedió en Charlottesville fue una tragedia", dijo Pence en una rueda de prensa conjunta en Cartagena de Indias con el presidente colombiano, Juan Manuel Santos, al comenzar una gira por cuatro naciones latinoamericanas que lo traerá a Chile.
Pence definió a esa ciudad como "una comunidad hermosa, una ciudad universitaria", y afirmó que "lo que sucedió allí (...) no refleja lo que piensa el pueblo de Charlottesville, o los Estados Unidos en general".
"El presidente Trump condenó lo sucedido de forma muy clara y dijo que el odio y la intransigencia que se vio en las calles de Charlottesville no serán aceptados. No se puede tolerar el odio, la violencia de grupos neonazis, supremacistas blancos o del Ku Klux Klan", agregó el vicepresidente.
"Condena contundente"
Una de las muertes se produjo cuando un automóvil atropelló deliberadamente a un grupo de opositores a la manifestación de los supremacistas blancos y las otras dos al estrellarse un helicóptero policial.
"Estos grupos extremistas peligrosos no tienen lugar en nuestro debate político y los condenamos de la manera más contundente", afirmó Pence, quien recordó que Trump "fue muy claro" al señalar que el comportamiento de ciertos militantes racistas "es inaceptable en nuestro discurso político".
Igualmente, citó a Trump para destacar la necesidad de que los extremistas "sean relegados y para que la mayoría de los estadounidenses que aman la libertad y la justicia para todos se unan" en torno a ese propósito.
Pence aprovechó la ocasión para manifestar su malestar con algunos medios de comunicación que, según dijo, muchas veces "critican más las palabras del presidente que la violencia generada" por extremistas. Trump fue cuestionado por no condenar directamente a los grupos racistas, sino que la violencia de ambos bandos.
Después de Colombia, Pence viajará a Buenos Aires, segunda etapa de su gira latinoamericana que continuará en Chile y Panamá.
