Al menos cinco personas murieron luego de que un hombre armado con un arma blanca agredió a varios agentes de la policía que se encontraba en la Prefectura de París, en pleno centro de la capital francesa.
La información inicial indicaba que había al menos un agente de seguridad muerto, pero el balance de víctimas subió después, confirmándose tres policías y una funcionaria fallecidos, además del agresor, quien era funcionario administrativo de la Dirección de Inteligencia de la Prefectura.
Además, otra persona permanece internada lesionada de gravedad.
En el momento del ataque, que tuvo lugar a las 13:00 hora local (08:00 hora chilena), las dependencias policiales se encontraban en plena actividad.
De acuerdo con la agencia EFE, el secretario regional del sindicato Alliance Police Nationale, Loïc Travers, explicó a la prensa que el autor del ataque, un trabajador del personal administrativo con más de 20 años de experiencia, fue abatido por otro policía con un arma automática. Pese a entregar esos datos, la identidad no ha sido revelada.
Según Travers, el agresor comenzó el ataque en su propio despacho, tras lo cual salió y continuó la agresión en las dependencias de la Prefectura, ubicada junto a la catedral Notre Dame de París.
Se desconocen por el momento las motivaciones del atacante, pero los primeros elementos facilitados por los medios apuntan que se trata de un asunto interno que afectaba al agresor, que utilizó un cuchillo cerámico y actuó solo.
El primer ministro Édouard Philippe, junto al ministro del Interior, Christophe Castaner, y su secretario de Estado, Laurent Nuñez, se trasladaron hasta la Prefectura.
"Espiral asesina"
Castaner confirmó que se trata de "un hombre de 45 años, del personal administrativo, empleado de categoría C desde 2003 en el seno de la Prefectura de Policía, que se vio envuelto en una espiral asesina".
"Este hombre era conocido del servicio informático, trabajaba junto a sus colegas y nunca mostró alguna dificultad en su comportamiento, nunca mostró ningún signo de alerta para que este día cometiera estos asesinatos", detalló.
Pese a la muerte del atacante, el procurador de París, Remy Heintz, informó que "hemos iniciado una investigación que será confiada a la Brigada Criminal de la Dirección Regional de la Policial Judicial: los cargos son homicidio voluntario en una persona depositaria de la autoridad pública y tentativa de homicidio voluntario en una persona depositaria de la autoridad pública".
"Esta investigación está en pleno desarrollo y buscará especialmente dejar en claro cuales fueron las motivaciones de este del acto del autor de los hechos", agregó.
De momento, se descarta la tesis de un acto terrorista y se privilegia el presunto móvil del desacuerdo laboral, lo cual hace eco en el seno de la policía, que recién ayer salieron a las calles a marchar por primera vez en dos décadas.
En tanto se esclarece el hecho, la Asamblea Nacional de Francia decidió guardar un minuto de silencio en honor a los policías muertos.
