Otras tres personas murieron hoy jueves por caídas de árboles provocadas por el temporal que azota al país.
Se prevé un fuerte aumento en la marea en las próximas horas.
Entre el lunes y el martes, una docena de personas murieron por el fuerte temporal.
Otras tres personas murieron este jueves como consecuencia de la caída de árboles tras las fuertes lluvias que azotan Italia, y que ya han causado un total de 12 fallecidos en los últimos días y mantienen en alerta la zona norte.
Dos de los nuevos decesos se registraron en la localidad de Lillianes, en la región septentrional del Valle de Aosta, cuando un árbol cayó sobre el vehículo en el que viajaban, informan los medios locales.
Una tercera persona murió después de permanecer hospitalizado desde el lunes, cuando también fue golpeado por un árbol cuando iba en su automóvil en la zona de Val Venosta (norte), según las mismas informaciones.
Los medios italianos añaden a estas víctimas por el mal tiempo en el país a una cuarta, un hombre de 81 años que falleció tras resbalar y caer mientras arreglaba el tejado de su casa, dañado por las tormentas.
Entre el lunes y el martes, una docena de personas murieron por el fuerte temporal, siete de ellos por caídas de árboles.
Al menos mil millones de euros en pérdidas
Las regiones del norte como el Véneto, Liguria o Piamonte siguen en alerta, aunque las lluvias están afectando también a las zonas del centro y del sur del país.
El presidente de la región del Lacio, Nicola Zingaretti, declaró el estado de calamidad para todo el territorio mientras que el del Véneto, Luca Zaia, cifró los daños de esta región en unos 1.000 millones de euros.
Está previsto que continúen las lluvias en Venecia, donde se estima que la marea suba hasta los 110 centímetros sobre el nivel del mar en las próximas horas, después de que en los últimos días haya llegado a los 156 centímetros.
Coldiretti, la mayor asociación de ganaderos y agricultores de Italia, señaló que los daños que han sufrido los campos en todo el país con las inundaciones y los fuertes vientos superan los 150 millones de euros, entre olivos arrancados, cultivos destruidos, siembras perdidas y terrenos inundados.
