Un contingente de 160 soldados del Ejército peruano fue delegado para ayudar en las labores de rescate.
El Instituto Nacional de Defensa Civil (Indeci) envió este sábado desde Lima un cargamento de cinco toneladas de techos.
El Gobierno declaró el viernes el estado de emergencia en la zona.
Cuatro muertos, tres heridos y más de 300 familias deja hasta el momento los deslizamientos de tierra y el desborde de ríos que afectan desde el jueves al centro de Perú, a causa de la acumulación de lluvias caídas en la región Junín a en los últimos días, informó el Instituto Nacional de Defensa Civil.
Dos de los fallecidos, identificados como Celestino Rivera, de 83 años; y Máxima Tejeda, de 74 años; perecieron en uno de los deslizamientos de tierra ocurrido a orillas del río Chanchamayo, lo que bloqueó la carretera entre las ciudades de Tarma y La Merced y arrasó con tres viviendas rústicas ubicadas a orillas del río.
Todavía no ha podido ser rescatado el cuerpo de la hija de este matrimonio, identificado como María Rosenda Rivera, de 37 años, quien todavía permanece entre los escombros. La otra víctima mortal es un menor de edad no identificado que murió en el pueblo de Ulcumayo, ubicado en la vecina provincia de Tarma.
La mayor inundación, con más de 300 familias afectadas, está en los municipios de Pichanaki y Perené, ubicados en la provincia de Chanchamayo.
El aluvión motivó que el Gobierno declarará el viernes el estado de emergencia en la zona para poder canalizar con mayor rapidez la ayuda necesaria.
Así el Indeci envió este sábado desde Lima un cargamento de cinco toneladas de techos, ropa de abrigo y artículos de primera necesidad.
También llegó a Chanchamayo un contingente de 160 soldados del Ejército para ayudar en las labores de rescate de personas y en la limpieza de las calles, con gran cantidad de lodo en aquellos puntos donde ya se retiró el agua.
