"En la ley de control de armas incorporamos un delito contra aquellas personas que provean de armas a adolescente", declaró el subsecretario.
Dos niños de 12 y 13 años de edad se entregaron este viernes a la PDI admitiendo su participación en el crimen.
El subsecretario del Interior, Juan Francisco Galli, condenó el portonazo que cobró la vida de una mujer en Peñalolén, en el que los presuntos victimarios fueron identificados como menores de 12 y 13 años.
En conversación con Cooperativa, la autoridad de Gobierno señaló que el caso es "aún más dramático por la participación de menores de edad, de niños, niñas y adolescentes que se involucran en actividades delictuales"
"Mientras haya un delito, nosotros tenemos que trabajar más en prevenirlo. Las penas tienen un fin preventivo, un fin de prevención general: aquellas personas que se involucran en actividades delictuales tienen que saber que van a ser perseguidas", declaró el subsecretario.
"Muchas veces son pequeñas organizaciones criminales las que involucran a menores de edad conociendo que ellos son inimputables -afirmó- En la ley de control de armas, que está siendo ahora en el Congreso, incorporamos un delito contra aquellas personas que provean de armas a niños, niñas y adolescente".
Buscamos no "solo imputarle el delito a ese niño (...) Esos adultos son los que introducen a esos niños a la actividad delictual", cerró Galli.
